Después de estar 14 horas retenido en el aeropuerto de Viena, Austria, el avión oficial del presidente Evo Morales partió de regreso a su país luego de que Francia, Italia, Portugal y España dieran marcha atrás y permitieran el paso de la aeronave por su espacio aéreo.

La nave había quedado varada porque los países europeos tomaron la decisión de rechazar su paso porque tenían la sospecha de que transportaba hacia América Latina a Edward Snowden, el “topo” de la CIA.

El embajador boliviano en Austria, Ricardo Martínez, detalló lo vivido por Evo Morales, y aseguró que el presidente "estuvo secuestrado durante 14 horas" en el aeropuerto de Viena, ante la negativa de varios países europeos de impedir que el avión presidencial atravesara el espacio aéreo.

Morales se quejó de la forma en que fue tratado por las autoridades de varios países de Europa, en lo que desató un verdadero escándalo diplomático. "No soy un criminal", dijo.

Por su parte, las autoridades austríacas insistieron en que el ex contratista de la CIA, el estadounidense prófugo Edward Snowden, no se encontraba a bordo del avión presidencial. El avión de Morales "aterrizó alrededor de las 21.40 (19.40 GMT) procedente de Moscú, los pasaportes fueron verificados y contrariamente a los rumores que han circulado, Edward Snowden no se encontraba a bordo", declaró el portavoz del ministerio del Interior austríaco, Karl-Heinz Grundboeck.