El entrenador de Boca Juniors, Guillermo Barros Schelotto, su hermano mellizo y ayudante técnico Gustavo, y el presidente del club, Daniel Angelici, se retiraron con una mueca de fastidio y mucha preocupación de la Bombonera luego del insípido empate entre la Argentina y Perú, alterados por la seria lesión que sufrió el capitán xeneize Fernando Gago, quien se rompió los ligamentos de la pierna derecha, según se supo hoy.

En ese contexto, los mellizos Guillermo y Gustavo presenciaron el empate sin goles entre Argentina y Perú en el palco de Angelici en la cancha de Boca y se retiraron raudamente sin efectuar declaraciones, aunque no ocultaron el fastidio que les generó la lesión de Gago, quien estará inactivo entre seis y ocho meses y su importancia en su club no solo se da en la cancha, sino también como uno de los referentes del plantel.

"El Tano Angelici tenía una calentura bárbara, la lesión de Gago lo sacó de contexto", confesó a Télam una fuente de la Comisión Directiva de Boca, que reveló también que el presidente tenía un mal humor imposible de ocultar.

Gago, de 31 años, ingresó anoche a los 14 minutos por Ever Banega y comenzó su pesadilla, ya que a los pocos minutos pisó mal al dar un pase, resbaló y se lesionó, lo que motivó su reemplazo inmediato por el mendocino Enzo Pérez.

El cerebral mediocampista de Boca sufrió, según detalló el parte médico del seleccionado, una rotura de los ligamentos cruzados anteriores y el lateral interno de la rodilla derecha, lesión por la que será operado la semana próxima (seguramente por el doctor Jorge Batista) y que le demandará una recuperación de entre seis y ocho meses, siendo además su tercera lesión seria en los últimos dos últimos años, ya que se rompió el Tendón de Aquiles dos veces, en 2015 y 2016.

En Boca, la lesión de Gago fue un "baldazo de agua fría", mientras que para el DT del seleccionado argentino Jorge Sampaoli se trató de un "mazazo" según reveló en la conferencia de prensa post partido, y de ahora en más intentarán buscarle un reemplazante para que cumpla su función en la cancha.

En ese contexto, en Boca saben que pueden ejercer la opción de incorporar a un futbolista del medio local y sino el mellizo Guillermo deberá ejercitar otras variantes tácticas, como retrasar a Edwin Cardona para que cumpla la función de Gago, así ingresaría en el equipo Oscar Junior Benítez para cubrir al colombiano y juntarse con Darío Benedetto y Cristian Pavón en la zona de definición.

En lo inmediato, la opción que Guillermo tiene a mano es incluir al uruguayo Nahitan Nández en el mediocampo junto al colombiano Wilmar Barrios y el rosarino Pablo Pérez, seguramente los tres serán titulares en el reinicio del campeonato frente a Patronato, en Entre Ríos, por la sexta fecha de la Superliga.

Sin embargo, Nández tiene características distintas a Gago y el futbolista del plantel más parecido es el colombiano Sebastián Pérez, quien casualmente está en el tramo final de la recuperación de una rotura de ligamentos que sufrió en abril de este año.

Pérez, un 5 con nivel de selección y títulos (ganó 10 en Nacional de Medellín y otro en Boca), de hecho era titular en el once de Colombia hasta que se lesionó, se estima que se sumará la próxima semana a los trabajos del plantel y será una opción para el mellizo, quien deberá encontrar una solución para que no se resienta el funcionamiento de un equipo que salió campeón hace tres meses, es líder de la Superliga con puntaje ideal y sueña con la Copa Libertadores de América del año próximo.

En cuanto a Gago, nacido el 10 de abril de 1986 en Ciudadela, intentará retornar al fútbol el año próximo, aunque según los primeros informes médicos su recuperación demandará entre seis y ocho meses, un período importante para un futbolista que ya pasó los 30 años.