Rosario Central llegó al final de la temporada como soñaba: con chances de ser campeón. Es cierto, en un torneo más que en el otro, porque el certamen doméstico Boca le lleva cinco puntos de seis en juego. Pero nada ni nadie le podrá robar a los canallas la ilusión de estos días.

Tras el regreso de Salta, donde logró el pasaporte a la final de la Copa Argentina que se disputará el 4 de noviembre en Córdoba (sujeto a confirmación), el plantel pondrá la cabeza en el duelo que se le viene ante Banfield, programado para el domingo a las 16.10.

Para el encuentro con el Taladro, es muy difícil que pueda jugar Nery Domínguez por una distensión en el isquiotibial izquierdo. Esa será una ausencia clave por el buen momento que atraviesa el mediocampista y el peso que tiene en la estructura futbolística auriazul.

Por otra parte, la lupa estará puesta en la recuperación de Marco Ruben, quien acabó el juego con la otra Academia con una fuerte dolencia en la zona intercostal. Por ahora, es sólo un golpe. 

Y también seguirán de cerca la evolución de Cristian Villagra, quien sale de un esguince de tobillo y será probado en el transcurso de los entrenamientos.  Los demás, en principio, estarían a disposición. 

El sorteo, el 22

Los canallas ya entraron a la Copa Libertadores 2016 y para conocer a sus rivales deberán esperar al 22 de diciembre. Su nominación en el certamen (Argentina 1, 2 o 3) depende de si logrará entrar como campeón o subcampeón de primera o si lo hará a través de la Copa Argentina, algo que ya se aseguró.

Si gana el torneo local, será Argentina 1; como subcampeón, entrará como Argentina 2; si se queda al margen de esos dos puestos, será Argentina 3.