De goleador a goleado. El Newell’s de Juan Pablo Vojvoda pasará a la historia como el equipo más irregular de la historia rojinegra. De arrasar 5-0 a Rancig el miércoles a ser atropellado 4-1 por Boca. Al local le alcanzó con un tiempo para sacar una diferencia de tres (en 5 minutos ya ganaba 3-0). Betancur, Tevez, Silva y Palacios marcaron para el Xeneize. Maxi Rodríguez descontó en el complemento. Unsain salió lesionado. Diego Osella asumiría en la semana como nuevo DT.
La pesadilla en la Bombonera comenzó a los 30 segundos cuando llegó un centro rasante al área de la visita y Betancur dio un paso atrás para sacar un remate bajo y seco al 1-0.
El segundo llegó a los 5 minutos con un tiro libre de Tévez que no fue ni muy potente ni muy esquinado pero Unsain dio un paso en falso y no pudo retenerlo.
Cuatro minutos después llegaba el tercero pero los árbitros salvaron –momentaneamente- a Newell’s y sancionaron un fuera de juego de Palacios que no existió.
Otra vez Tevez, a los 18, demostró la fragilidad leprosa. Encaró a una defensa muy abierta (eran tres contra uno) y sacó un remate débil que esta vez sí el arquero rojinegro pudo atrapar. Pero estaba claro que si Boca seguía con esa intensidad lograría el tercero.
Y llegó a los 36 de un tiro esquina (de un rechazo que casi fue gol en contra). Silva (solo) le dio de zurda mordido e Insaurralde (solo) intentó corregir con la cabeza, aunque no la habría tocado. No lo gritó.
Si algo le faltaba al equipo rojinegro era perder a su arquero por lesión en la última jugada, a los 44, tras taparle un mano a mano a Tevez y sufrir un rodillazo en la cara. Lo reemplazó D'Angelo.
Para el segundo tiempo, Vojvoda metió en cancha a Mugni por Scocco –otra vez ausente-. El equipo lució más entero e incluso se entusiasmó a los 11 minutos cuando Boyé aguantó y habilitó a Maxi Rodríguez, quien definió excelente para 1-3.
El descuento generó la ilusión de una levantada. Pero Boca siguió con el control del juego y cuando quiso –cuando Tévez quiso- marcó el cuarto (Palacios) y sepultó cualquier anhelo leproso.
Quedó tiempo para la ovación a Tévez que fue reemplazado por Arruabarrena y para nada más. Después se supo que Unsain sufrió una fractura del maxilar inferior y será operado en Rosario. Newell's se vuelve a la ciudad con una derrota dolorosa y con una sola de cara al futuro: la nueva etapa -con Osella o no, no fue confirmado- difícilmente sea peor que el arranque de año.
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