Por la cuarta fecha de la Superliga de primera división, Newell's cayó por la mínima diferencia ante Lanús, que ganó por el gol de Alejandro Silva a los 15 minutos del segundo tiempo. El Granate se mantiene en racha en el torneo y en la Copa Libertadores, mientras que el rojinegro sufrió el segundo traspié y no pudo sostener el impulso que había logrado al vencer a Olimpo. 

Los de Juan Manuel Llop luchó hasta el final y generó varias ocasiones de peligro, pero no pudo hallar la contundencia que sí tuvo su adversario en el área ñubelista. El conjunto local acabó con diez hombres por la expulsión de Diego Braghieri, a cinco minutos del epílogo.



El equipo del Parque no mereció la caída. Tuvo su llegada más clara del primer tiempo apenas iniciado el pleito, a través de un desborde de Joaquín Torres que Fertoli no pudo empujar al gol dentro del área chica. Los de Almirón contaron con un cabezazo de Canuto que dio en el palo como la ocasión más peligrosa.

En el marco de un trámite de suma paridad (con algo más de manejo de pelota de parte de los volantes de Lanús), Alejandro Silva rompió el molde merced a un disparo de pelota detenida que se clavó, desde el costado derecho de la defensa, en el ángulo contrario de Pocrnjic. Iban 15 minutos y la visita debía salir a buscar el empate.

El portugués Leal contó con una posibilidad nítida, pero no pudo definir cómodo ante el cierre de un defensor; Víctor Figueroa desperdició tres tiros libres directos desde las adyacencias del área (incluida la de Leal que terminó en la roja a Braghieri); sobre el final, un cabezazo de Nehuén Paz pasó cerca. Todas posibilidades que Newell's despilfarró y en las que podría haber igualado.

El conjunto del Chocho mejoró en su intensidad (lo mejor, las uniones entre Fertoli y Figueroa y el desparpajo de Torres), estuvo bastante ordenado, jugó de igual a igual y sólo pecó a la hora de levantar los centros desde las bandas, los disparos de pelota detenida y la definición dentro del área. La Lepra dio buenas señales, aunque deberá trabajar mucho porque eso no alcanza para ganar.