La estadounidense Venus Williams, de 37 años y cinco veces campeona en Wimbledon, la última en 2008, se medirá mañana con la ascendente española Garbiñe Muguruza, de 23 años y con un sólo Grand Slam en su haber, Roland Garros 2016, en la final que consagrará a la nueva reina sobre el césped del coqueto All England Club, en Londres.

Venus Williams, ubicada en el puesto 11 del ranking mundial de la WTA, y la venezolana nacionalizada española Muguruza (15) se enfrentará este sábado a partir de las 10 (hora de la Argentina) con televisación de la señal de cable ESPN.

La veterana Venus, hermana mayor de Serena (lideró el ranking hasta que quedó embarazada este año), se coronó en Wimbledon en 2000, 2001, 2005, 2007 y 2008, y además coleccionó dos US Open (2000 y 2001), antecedentes que le dan cierto favoritismo, además de su nivel de juego, demostrado durante las dos semanas del torneo y ratificado en la semifinal que le ganó a la inglesa Johana Konta (7) por 6-4 y 6-2, sin pasar ningún sobresalto.

Muguruza, quien llegó a ocupar el segundo puesto del ranking mundial hace 13 meses, mostró un gran tenis durante todo el certamen y en semifinales arrasó a la eslovaca Magdalena Rybarikova (87) por un contundente 6-1 y 6-1.

De todas maneras, los antecedentes previos favorecen a la tenista nacida en Lynwood, California, por 3-1, tras haberse impuesto en los cruces jugados en Florianópolis 2013, Auckland 2014 y Wuhan, China, 2015.

El único triunfo de la tenista nacida en Caracas fue este año en el abierto de Roma.

"Tengo que salir a al cancha, pensar que quiero ganar y creérmelo. Creo que las dos tenemos las mismas chances de quedarnos con el título, aunque también me veo con más posibilidades hoy que hace cinco días", explicó Muruguza, quien perdió la final de Wimbledon en 2015 ante Serena Williams.

Las conquistas españoles en damas en el All England Club tienen apenas un antecedente, se remonta a la final de 1994 que la aragonesa Conchita Martínez, actual entrenadora de Muguruza, le ganó a otra norteamericana de 37 años, Martina Navratilova, por 6-4, 3-6 y 6-3, en una final que muchos españoles toman como una suerte de talismán por las coincidencias, de cara a la final de este sábado.