En Newell's se vivieron momentos de tensión cuando se estaba desarrollando la asamblea ordinaria para consideración de Memoria y Balance del período 2016-2017.

El acto comenzó cerca de las 19 en el estadio cubierto pero duró apenas unos minutos, debido a que comenzaron los episodios violentos al momento de elegir las autoridades del acto.

Sobre el escandaloso episodio, un video que grabó un hincha muestra como mientras los asistentes votaban por quienes iban a presidir la asamblea (oficialismo u opisición), empezaron a volar sillas y golpes de puño.

El caos se hizo dueño del lugar, los socios debieron retirarse y quedar a pocos metros de la barra brava que estaba en la puerta del club custodiada por un puñado de efectivos policiales, y muchos no pudieron volver a ingresar ya que en el interior del estadio cubierto el acto continuaba. De hecho llegó a su fin y se aprobó el balance.

La voz que resta por escucharse es la palabra de la de Inspección General de Personas Jurídicas (IGPJ) para que dictamine si es válido el acto.

Desde la oposición, Daniel Giraudo, había advertido a Rosario3.com que habían recibido "aprietes presenciales, llamados y mensajes a través de Whatsapp" para que aprueben el balance contable.

El propio Giraudo dijo en Telenoche (El Tres) que la propuesta de la oposición no era votar en contra del balance sino pedir un cuarto intermedio para poder analizar los números: "Los bandos que acompañan a la Comisión Directiva nos empezaron a agredir. Había matones que empujaban a las mujeres. Tengo un golpe en la cabeza por un sillazo. Ariel Moresco (otro integrante de la oposición) fue muy golpeado".

"Volvimos a las peores épocas, donde estaba el presidente Eduardo López", sentenció Giraudo, quien denunció que el vicepresidente Cristian D'amico le dijo "esto me lo vas a pagar" y lo acusó de haberle mandado gente a que lo baleen aquel 13 de noviembre de 2016.

El propio D'amico habló también con Alberto Lotuf en el noticiero de El Tres, dando la versión de la dirigencia: "Los señores Daniel Giraudo y Federico Ripani de la oposición fueron quienes comenzaron los hechos violentos. Esta gente no termina de entender que las elecciones terminaron y ahora hay que acompañar al club".

El dirigente fue por más al afirmar que "intentaron generar un caos buscando una intervención", en referencia a Giraudo y Ripani, a quien responsabilizó por haber comenzado el caos. 

"Giraudo estuvo 7 años al lado de la dirigencia de Ricobelli. Tiene que hacerse cargo, tener memoria y dejar de tirar bombas por twitter", dijo D'amico.