El canciller de Uruguay, Francisco Bustillo, presentó este jueves su renuncia al cargo, horas después de que se conociera que quiso presionar a una subsecretaria de esa cartera para ocultar información a la Justicia sobre el otorgamiento de un pasaporte al narcotraficante Sebastián Marset.

La exsubsecretaria de Relaciones Exteriores Carolina Ache entregó a la Fiscalía unos chats que cruzó con el hasta hoy canciller, en los que este le sugería que “pierda” el celular para evitar darle a la Justicia conversaciones vinculadas a la entrega del pasaporte uruguayo al narcotraficante Marset.

En la serie de audios de WhatsApp, Bustillo --un diplomático con larga trayectoria que fue embajador en argentina-- le pide a Ache, que no revele sus chats con el viceministro del interior, Guillermo Maciel, quien le había advertido que Marset “era un narco peligroso”.

–Maciel tiene los mismos WhatsApp que yo –dijo Achet.

–Tiene los mismos WhatsApp, sí claro. Pero yo no creo que Maciel sea tan tarado de blanquearlos. Yo no puedo creer. Se pegaría un tiro en el pie –respondió Bustillo.

–Sí, claro. Pero a mí, cuando se sepa la investigación…

–Maciel no zafa mandándote al frente a vos. No zafa. La responsabilidad primaria (es) de él. Los únicos que podían detener la emisión del pasaporte es el Ministerio del interior.

Luego de que esta información tomara estado público, el Frente Amplio (FA) había reclamado la renuncia de Bustillo y una explicación de Lacalle Pou.

La noticia de la renuncia fue revelada por Telenoche y confirmada por los diarios El País y La Diaria, que detallaron que Bustillo conversó la decisión con el presidente Luis Lacalle Pou, quien estaba en Estados Unidos.

Un rato después, la dimisión fue oficializada en la cuenta oficial de los Medios Públicos en la red X y trascendió la carta con que Bustillo dimitió.

"Deseo manifestar que no hubo nada ilegal en la tramitación del pasaporte tramitado para el señor Marset, en cuya instancia tampoco tuve participación ni conocimiento alguno", afirmó el flamante exministro en ese texto.

"Por supuesto, tampoco mentí o me aparté de la verdad en la interpelación parlamentaria", aseguró, y apuntó a la entonces vicecanciller: "La Dra. Ache, descontextualizó conversaciones y obró de mala fe".

Bustillo subrayó que "las cosas no son como se las ha mostrado, pero resultan suficientemente sensibles como para haberle presentado la inmediata renuncia al Señor Presidente".

El caso

  

Marset es un delincuente que en la última década actuó en Uruguay, Paraguay y Bolivia. Está involucrado en el transporte de cocaína al hemisferio norte, entre otros graves crímenes, y en una breve detención que tuvo en Qatar presentó un pasaporte uruguayo vigente.

En agosto último, logró escapar de un operativo policial en Bolivia, donde se investiga ahora si tuvo ayuda policial y de funcionarios.

En Paraguay se sospecha, además, que puede tener relación con el asesinato, en mayo del año pasado, del fiscal paraguayo Marcelo Pecci, muerto a tiros en una playa de Cartagena, Colombia, durante su luna de miel, informó Télam.

En la conversación filtrada, Bustillo le dice a Ache que el subsecretario de Interior, Guillermo Maciel, es “un tarado”, pero que no va a dar la información que reclamaba la Justicia, vinculada a las conversaciones con ella sobre Marset, y advirtió que si lo hacía, “se incrimina solo”.

Maciel fue el primer funcionario que compareció ante la Fiscalía y evitó hablar con la prensa sobre el caso.

Bustillo se refiere a las conversaciones del 21 de septiembre y el 3 de noviembre de 2021, en las que Maciel le consulta a Ache sobre la detención de Marset en Dubai y le advierte que es un narcotraficante “pesado y peligroso”.

“Yo no creo que Maciel sea tan tarado de blanquearlos, se pegaría un tiro en el pie. Maciel no zafa mandándote al frente a vos, no zafa. Los únicos que podían detener la expedición del pasaporte o no es el Ministerio del Interior. Más allá de la alerta que te haya dado, eso no le quita la responsabilidad a él, superlativa cuando él sabía que había una investigación contra este tipo, me parecería un anormal si hace eso, se incrimina solo”, expresó Bustillo en la conversación con Ache.

Cuando la exsubsecretaria le planteó que Maciel ya había “volanteado” esas conversaciones, Bustillo respondió: “Sí, porque es un tarado, pero yo creo que a esta altura tiene que haber reflexionado y darse cuenta que no zafa por ahí; yo creo que el tipo es un tarado”.

“Que se mande al frente Maciel, vos perdé el celular… Estoy imaginando escenarios (...) hay que ir sorteando esto es paso a paso”, apuntó el canciller.

En otro audio, Bustillo le dice que va a tratar de hablar con Carlos Mata -director de Asuntos de Frontera- en busca de evitar entregar los chats en la investigación administrativa y sortear la indagatoria de la funcionaria Karina Antelo: “Que por lo menos no guaranguee con las preguntas, que mande a un tercero y que no sea tan incisivo”.

Cuando Ache le dice que no hay manera de no entregar los WhatsApp, Bustillo le responde: “Busquemos la vuelta para que no tengas que entregar eso porque ahí te dejan repegada, al cuete. Dejame hablar con Mata para ver si hay algún tipo de forma en la que él pueda hablar con la tipa (la funcionaria sumariante) e incidir”.

Ache le plantea a Bustillo que igual después esos mismos chats se los va a pedir la Fiscalía en la investigación penal, a lo que el ministro de Relaciones Exteriores le responde: “Eso es otro cantar, acá hay que ir ganando tiempo y llevándola”.

Además, Ache aportó a la fiscalía documentación para probar que el asesor de Presidencia de la República Roberto Lafluf destruyó un acta notarial de la Cncillería que contenía los chats y le pidió a ella que borrara los mensajes y certificara con una escribana que esos mensajes no estaban en su celular.

En ese contexto, el fiscal de Delitos Económicos y Complejos de primer turno, Alejandro Machado, estaba evaluando la posibilidad de disponer la reserva de esa declaración, por lo que la causa continuaría sin que los abogados de los otros investigados tengan acceso a la declaración de Ache.

A la salida de su declaración, en conferencia de prensa, Ache manifestó que renunció a su cargo por negarse a “cometer un delito”.