Una inesperada situación opacó el triunfo de Novak Djokovic ante el francés Corentin Moutet este viernes, en la segunda ronda del Masters 1000 de Roma. Luego de llevarse el partido por 6-3 y 6-1, el serbio recibió un botellazo en la cabeza cuando se dirigía a la zona de vestuarios y se detuvo para firmar algunos autógrafos del público.

Mientras le dejaba su autógrafo a uno de los espectadores del partido, el tenista de 36 años recibió el impacto de una botella de agua que cayó desde la tribuna, tras lo cual se tomó la cabeza y se tiró al suelo, en donde permaneció durante algunos segundos.

Más tarde, se constató que Nole tenía un corte en el cuero cabelludo que le produjo un sangrado y requirió de tratamiento.

Según informó el medio Sky Sport de Italia, Djokovic fue escoltado por personal de seguridad privada y fue trasladado de inmediato a la enfermería para ser atendido. El serbio volvió al vestuario con una venda en la cabeza y con signos de preocupación por el incidente.

En tanto, la policía romana ya comenzó a revisar las imágenes de las cámaras en el estadio para poder identificar a la persona que arrojó la botella y determinar si el hecho fue intencional o accidental. A su vez, Djokovic decidió suspender la conferencia de prensa.

Por otro lado, la organización del torneo de Roma emitió un comunicado oficial sobre lo acontecido en el que confirmó que el tenista "abandonó el Foro Itálico para regresar a su hotel" y que su estado no era "motivo de preocupación".