En la actualidad, los antibióticos -utilizados de forma tópica, inyectable, o por vía oral- son relativamente fáciles de producir y este podría ser uno de los motivos por los que hace unos años la comunidad médica notó con preocupación que las bacterias se están volviendo cada vez más resistentes. Esto significa que los que antes eliminaban las bacterias ahora ya no son eficaces.

"Los antibióticos funcionan mediante la interrupción de algún aspecto de la función bacteriana. Pero con el tiempo, las bacterias pueden mutar o cambiar", dijo el pediatra Howard J. Bennet del Chevy Chase Pediatrics Center al Washington Post y lo comunicó el sitio Infobae.

"Supongamos que una bacteria accidentalmente produce una enzima que reduce la eficacia de un antibiótico. Esta bacteria tiene más probabilidades de sobrevivir y, por lo tanto, reproducirse, que una que no es resistente al antibiótico", explicó. 

La resistencia proviene casi exclusivamente del uso excesivo de antibióticos. Pero, ¿por qué los niños de hoy en día están siendo medicados innecesariamente con antibióticos?Principalmente porque la accesibilidad muchas veces da lugar a que ante el primer síntoma, los padres deciden "automedicar" a sus hijos con lo que creen que es conveniente. Muchas veces se cree que ante un cuadro viral como un resfrío, catarro o gripe un tratamiento antibiótico es la herramienta más eficaz. pero esto es un error ya que éstos no funcionan contra los virus.

En este cuadro no sólo no mejoran la infección, sino que se pueden eliminar a las bacterias "buenas" y permitir que las otras se reproduzcan, lo que conduce a infecciones cada vez más resistentes.

Para evitar la propagación del uso indebido y como consecuencia el crecimiento de la resistencia bacteriana en todo el planeta, es necesario que siempre sea bajo la indicación de un médico y que se respeten las instrucciones en cuanto el horario de la toma, la dosis y la duración del tratamiento a pesar de que desaparezcan los síntomas.