A ver, para muchos y muchas bañarse puede representar una tarea nada feliz. Pero, imaginen si eso se transforma en un verdadero suplicio.
Niah Selway, una estudiante británica de 17 años, padece un calvario cada vez que tiene que pasar por la ducha.
La joven, de 17 años, padece urticaria acuagénica. Dicho de otro modo: es alérgica al agua. Se trata de una afección que sólo padecen 35 personas en todo el mundo, según informa The Mirror.
Para más datos, el medio británico señala que “sus propias lágrimas le hacen daño”.
“Vivir con esto es una pesadilla. Cuando tomo contacto con el agua, mi piel siente que se está quemando. Y no hay nada que pueda hacer”, revela la joven
Niah, que vive con su familia en Hastings, Inglaterra, reconoce estos efectos negativos con el agua desde los cinco años.
Sin embargo, logró entender qué le pasaba cuando tomó contacto –tras una búsqueda en Internet– con otro caso similar, una chica que vivía en Estados Unidos
Tras el hallazgo de la joven, los médicos en el Reino Unido determinaron la afección.
Niah explicó que no siente dolor si toma agua ya que es un problema en la piel. Pero caminar bajo la lluvia o meterse en una pileta, en cambio, son verdaderos problemas.
La condición de Niah no tiene cura por ahora, aunque ella probó con varios tipos de antihistamínicos para luchar contra su alergia.
