El Bosque de los Constituyentes abarca un total de 300 hectáreas, de las cuales 20 están disponibles para el acceso público con servicios como baños, agua potable, electricidad, juegos para niños y un salón de usos múltiples que -con reserva previa- puede utilizarse para distintos eventos.

Bordeado por el arroyo Ludueña, el bosque invita a un especial encuentro con la naturaleza.

Hay más de 40.000 árboles de diversas especies y una pequeña laguna artificial con plantas acuáticas, ranas y caracoles. También hay caballos, llamas -que fueron llevadas al bosque cuando cerró el antiguo zoológico de la ciudad-, tortugas, patos, gansos, garzas y otras aves silvestres.