El ministro de Aguas y Servicios Públicos de Santa Fe, Antonio Ciancio, defendió el trabajo que realiza la Empresa Provincial de la Energía (EPE) y confirmó que no volverán a firmar el convenio con la Nación para congelar las tarifas eléctricas al valor del 31 de diciembre. Además, informó que este jueves “quedaron 80 reclamos” que se iban a resolver con el correr de las horas.

En diálogo con el programa A Diario (Radio 2), Ciancio destacó que “superaron” el día martes, cuando se registró una sensación térmica cercana a los 42 grados y récord en el consumo de energía. “Estamos cumpliendo el camino que emprendimos hace ocho años”, agregó.

El funcionario provincial comparó los cortes del luz de Santa Fe con los de Buenos Aires. “En Capital Federal es un caos, como siempre, mientras que acá vemos cómo el consumo no decae a pesar de las altas temperaturas. Avanzamos mucho”, añadió.

El ministro de Aguas y Servicios Públicos también señaló que desde el 2008 habían planificado invertir 1.000 millones de pesos y “sólo en 2014” se destinaron 1.047 millones de pesos hacia el sector. “Pusimos el problema sobre la mesa como el más importante a resolver. Y se nota. Vendemos más del 50 por ciento de la energía que cuando tomamos la gestión”, comentó. 

“El martes tuvimos un consumo de 2.052 megavatios. Cuando empezamos la energía se cortaba en 1.500. Ahora las interrupciones son de menor duración y tienen una rápida reparación por parte de nuestras cuadrillas”, indicó.

Tarifa descongelada

Antonio Ciancio explicó que el año pasado, cuando se firmó el convenio tarifario con Nación, les dijeron que “no iban a hacerse cargo” de lo invertido por la provincia previo al acuerdo firmado el 4 de junio de 2014.

“La Nación nos dijo que no iban a financiar lo invertido antes de abril. Solos, financiamos 500 millones de pesos en las nuevas instalaciones. Y de los 471 millones que ejecutamos recibimos 101. Nos deben alrededor de 400 millones de pesos, tuvimos que absorber los gastos”, precisó.

Además, el funcionario manifestó que “es el dos por ciento de la población la que tiene problemas con los cortes”. “La idea es llegar al 0,5 por ciento”, detalló.