Varios procedimientos de prevención y control vehicular tuvieron lugar entre la noche de el viernes y la madrugada de este sábado con el resultado de 28 remisiones al corralón municipal. La intervención fue efectuada por personal de la Secretaría de Control y Convivencia Ciudadana municipal en colaboración con efectivos de la Unidad Regional II de la Policía de Santa Fe.

En relación a los operativos, el secretario Pablo Seghezzo señaló: “Este viernes a la noche y durante la madrugada de este sábado estuvimos presentes, de manera preventiva, en zonas muy concurridas de la ciudad a fin de concretar tareas de control en el tránsito y también del uso del espacio público.

Priorizamos las salidas del predio de colectividades donde estaremos presentes todos los días y también los sectores donde habitualmente se congregan los jóvenes”. En este sentido, confirmó que se trasladaron al corralón municipal un total de 28 vehículos, 23 autos y 5 motos, a modo sancionatorio.

“Del total de 28 traslados, 23 fueron por alcoholemia positiva”, indicó el funcionario. “Son vehículos cuyos conductores, al ser testeados, mantenían en sangre niveles de alcohol no permitidos”, explicó y señaló: “El nivel más elevado encontrado entre los conductores alcoholizados fue de 1.77”. El resto de las remisiones obedecieron a faltas vinculadas con la documentación requerida para circular por la ciudad.

Test preventivos en colectividades

El viernes, más de 50 personas pasaron por la carpa de la Municipalidad de Rosario ubicada en el predio de Colectividades para realizarse el test de alcoholemia antes de manejar. Muchos conductores que habían tomado pequeñas cantidades se realizaron el control voluntario y preventivo para ver como se comportaba el alcohol en su cuerpo.

“La iniciativa tuvo una gran aceptación, e independientemente del resultado del test lo más importante fue la concientización que se llevaron, el saber cómo va subiendo o disminuyendo la graduación según el tiempo que pasó de la última ingesta y por sobre todas las cosas que si habían bebido de más no podían conducir. La gran mayoría ya tenía un conductor designado o había llegado en transporte público”, señaló Seghezzo.

“En la noche de este sábado, al igual que el fin de semana que viene estaremos a partir de las 21 hasta el cierre haciendo estos test voluntarios, acompañados de una amena charla concientizandora. Antes de la sanción viene la prevención, y aquí los conductores tienen la posibilidad de optar por no manejar bajo los efectos del alcohol”, culminó el funcionario municipal.