El presidente de Francia, François Hollande, confirmó esta mañana que son 150 las personas que viajaban en el avión de la compañía Germanwings que se dirigía de Barcelona, España, a la ciudad alemana de Düsseldorf, y se estrelló sin dejar sobrevivientes en la región de Digne, en los Alpes franceses.

El mandatario galo aseguró en un discurso publicado por la edición online del diario Le Figaro que como consecuencia de la "tragedia" acontecida esta mañana "no hay sobrevivientes", y precisó que en principio "no habría víctimas francesas".

La compañía Germanwings aclaró a través de su cuenta oficial de Twitter que en el “Air Bus A320 viajaban 144 pasajeros y 6 miembros de la tripulación”, y puso a disposición de los familiares un teléfono gratuito para contactarse.

El secretario de Transportes de Francia, Alain Vidal, confirmó que "el avión se estrelló en las montañas de Estrop”, como habían informado más temprano medios locales.

“Esta es un área que está cubierta de nieve, es inaccesible para los vehículos”, señaló Vida, y detalló que los equipos de rescate deberán acudir a la zona en helicópteros.

Por su parte, el presidente del gobierno español, Mariano Rajoy, suspendió todas las actividades previstas en su agenda y aseguró a través de su cuenta de Twitter que constituyó “un gabinete de crisis” para afrontar el caso, y que “la ministra de Fomento (Ana Pastor) se traslada a Francia”.

Según informó su Gobierno y consignó el diario El País, unos 45 pasajeros del avión serían de nacionalidad española.

Rajoy aseguró estar “consternado por el accidente aéreo en los Alpes. Una tragedia. Trabajamos con las autoridades francesas y alemanas en la investigación”.

En este sentido, el aeropuerto de El Part, en Barcelona, de donde partió el vuelo, abrió una sala para recibir a los familiares de las víctimas.

En tanto, la canciller alemana, Angela Merkel, quien también suspendió su agenda, expresó en una conferencia de prensa que siente un "dolor inconmensurable" con este desastre.

El avión que protagonizó la tragedia, que según informó el diario galo tenía 24 años de antigüedad, era un Airbus A320 de la aerolínea de bajo costo Germanwings, una firma filial de Lufthansa, que trasladaba 144 pasajeros, dos pilotos y cuatro asistentes de vuelo.

La aeronave desapareció de los radares en la región alpina de Alta Provenza y se estrelló cerca de la localidad de Barcelonnette, según precisó la agencia de noticias Europa Press.

En tanto, de acuerdo a informado por la emisora francesa Europe 1, dos helicópteros de la Gendarmería confirmaron a la Dirección General de la Aviación Civil (DGAC) que fue localizado el aparato cerca de Prads-Haute-Bléone, entre Digne-les-Bains y Barcelonnette.

La web especializada Flightradar24, que hace un seguimiento de los vuelos, perdió señales del avión a las 7.39 (hora de Argentina), cuando la nave volaba a una altitud de 6.800 pies (unos 2.000 metros de altura).

Germanwings es la filial de bajo costo del Grupo Lufthansa, que fue fundada en 1997 y comenzó a funcionar en 2002.

Esta aerolínea opera a más de 100 destinos de Europa, norte de África y Medio Oriente y en la Península Ibérica llega a nueve ciudades: Barcelona, Bilbao, Jerez de la Frontera, Madrid, Málaga, Valencia, Faro, Lisboa y Oporto, además de a Ibiza y a Palma de Mallorca.

La aerolínea alemana sufrió otros incidentes en los últimos años, pero de menor alcance y sin consecuencias.

En mayo de 2014 un piloto abortó el despegue desde Cagliari, en la isla italiana de Cerdeña, al sentir un olor extraño que generó que el avión regresara a la terminal y los 143 pasajeros volaron al aeropuerto de Colonia en un reemplazo.

En marzo de 2013, los pilotos de otro Airbus de Germanwings que partía de Londres hacia la ciudad alemana de Stuttgart interrumpieron el vuelo por precaución y regresaron a la capital británica, ya que también percibieron un olor extraño en la cabina. Esta vez los 141 pasajeros abandonaron el aparato normalmente, por las escaleras.

Este es el primer accidente de un avión de pasajeros en suelo francés en 15 años, cuando en julio de 2000 cayó un Concorde en Gonesse, cerca de Roissy, recordó Le Figaro.