Si estas acciones del organismo que convierten los alimentos en energía y que conforman el metabolismo, se llevan a cabo con lentitud, se desechan menos nutrientes y estos se transforman en grasa que añaden peso al cuerpo y ponen en riesgo la salud.

Teniendo en cuenta esto, la mejor forma de perder peso es modificar el metabolismo lento y acelerarlo, según plantea el portal MejorconSalud. Para conseguirlo se requiere mucha disciplina, esfuerzo y motivación, aunque las estrategias sean sencillas.

Consejos para modificar el metabolismo lento

1. Hacer cinco comidas al día

El aparato digestivo suele guardar parte de lo que se come para que se tengan reservas en caso de no ingerir comida durante mucho tiempo.

Este rasgo evolutivo tiene poco sentido en sociedades donde el alimento está garantizado y, por ello, esas reservas se convierten en grasa.

Sin embargo, si se acostumbra al organismo a comer cinco veces al día, éste sabrá que no tiene por qué guardar nada, y así se logrará modificar el metabolismo lento.

2. Hacer ejercicio

Hacer deporte implica usar energía que de otro modo no se utiliza, lo que contribuye a la aceleración del sistema metabólico.

Lo ideal es variar la intensidad en el entrenamiento para que la inversión de energía no sea siempre la misma. Cuando esto sucede, al final el metabolismo vuelve a ralentizarse.

3. Tomar agua

El agua llena el estómago pero no contiene ningún elemento que dificulte la digestión. Por el contrario, activará el proceso de metabolización.

En este sentido, cuanta más aguase beba, más rápido será el mismo. Lo conveniente es tomar de 2 a 3 litros diarios.

4. Usar aceite de coco

Además de ser un aceite muy sabroso, es mucho más estimulante que el aceite de oliva. De hecho, incluso puede llegar a quemar tres veces más calorías que otros ingredientes similares.

Esto sucede porque el aceite de coco permite que se entre en un estado denominado cetosis, que consiste en usar como combustible las grasas en vez de los azúcares.

Hay muchas recetas y formas de usarlo. Para los principiantes, es bueno comenzar con una cucharadita antes de comer o emplearlo como sustituto del aceite de oliva.

5. Aromatizar las comidas con canela

Aunque parezca mentira, esta especia capacita al oranismo para absorber los azúcares mucho más rápido. Hay investigaciones que aseguran que esa absorción puede llegar a realizarse hasta veinte veces más rápido de lo normal.

Hay muchos platos donde se la puede añadir, pero se recomienda usarla como edulcorante natural en el café o el té. Se eliminará la presencia de productos nocivos sin renunciar a una bebida con mucho sabor.

6. Desayunar con café

La cafeína no solo te despereza, sino que, además, acelera el ritmo cardíaco. Activar el corazón es importante porque pone en funcionamiento al resto de tu organismo, incluido el metabolismo.

7. Incluir el pescado azul en la dieta

El primer beneficio que se encontrará es que se sentirá lleno antes de lo habitual, por lo que se va a comer menos cantidad.

Por otra parte, el organismo se quedará solo con lo que necesite de él y desechará lo demás, ya que es fácilmente digerible. Al ser ligero, el proceso será rápido y se podrá modificar el metabolismo.

8. Comer picante

Los picantes incrementan la temperatura del cuerpo. El calor ayuda a cambiar el metabolismo lento, porque lo pone en alerta. Entiende que tiene que procesar los nutrientes y, al combinarlos con elementos ligeros, todo se acelerará.

9. Racionalizar las comidas

No hay que renunciar al sabor. Mezclar alimentos que gusten con otros ingredientes que ayuden a digerir más rápido y mejor es la idea.

Hay que ser constante cuando se intenta cambiar el metabolismo, incluyendo la necesidad de introducir cambios, tanto en la dieta como en la intensidad del ejercicio físico.