Desde afuera, parecen sólo bares donde la gente que asiste escucha música y toma un trago. Pero en su interior ocurren experiencias novedosas de intercambio cultural que poco a poco van echando raíces en Rosario. Se llenan de extranjeros que quieren aprender español y de rosarinos que estudian otras lenguas y desean practicar conversación con nativos de esos países. Están coordinados por docentes de idiomas que mezclan de forma creativa, gramática y socialización en un mismo ámbito.

“La idea surgió de una necesidad personal. Soy profesora y traductora de Inglés. Cuando me recibí, viajé al exterior y al volver noté la falta de intercambio cultural que había en Rosario con personas que hablan otros idiomas, en especial, inglés. Entonces, con una amiga que dirige el instituto de idiomas Spanish In Rosario, pensamos en armar algo que diera respuesta a esta demanda”, explicó a Rosario3.com, María Laura De Luca, directora del instituto In-Genius, una de las impulsoras del Barlingual Rosario que empezó a funcionar en junio pasado y es el segundo en su estilo en la ciudad.

El Barlingual Rosario, funciona con eventos especiales –uno por mes– en el pub Cherry Blossom, ubicado en la esquina de Salta y Balcarce, y en la fecha acordada, se reúnen locales y visitantes durante dos horas para hablar en Español e Inglés, con la guía de las docentes que se ocupan de que todos dialoguen.

“Uno nota que en los institutos se enseña estructura, gramática y vobabulario del idioma elegido, pero falta alguna instancia que permita relacionarse con los protagonistas de la cultura en forma directa. Eso es lo que tratamos de hacer en Barlingual que nació como una experiencia ligada a nuestros alumnos, pero a partir del encuentro de julio –el segundo– se abrió a la comunidad”, señaló De Luca.

La edad de los concurrentes oscila entre 25 y 35 años. Se trata de un espacio informal y abierto al que pueden asistir todos los que quieran hacerlo, cualquiera sea el nivel de manejo lingüístico de inglés y español. El único requisito es que sean mayores de edad, ya que el encuentro es en un bar y la entrada incluye una consumición de cerveza que puede reemplazarse por gaseosa o agua mineral, según el gusto del público. Pasadas las dos horas de práctica –de 20 a 22– el bar sigue abierto y los que deseen, puede quedarse a escuchar música y bailar.

Las convocatorias para los eventos (que constan de charlas, trivias y juegos, entre otros recursos pedagógicos) se realizan  a través de Facebook  y mediante invitaciones que se reparten en hostels de Rosario donde se alojan australianos, americanos, franceses y hasta japoneses que están en Rosario por diversos motivos y quieren aprender español. “Algunos vinieron por trabajo, otros están estudiando y hay quienes conocieron a un rosarino o rosarina y por esa razón, vinieron a conocer la ciudad”, agrega la docente e invita para el evento del 11 de agosto próximo.

La Chamuyera picó en punta

Una iniciativa similar comenzó hace un par de años con el nombre de La Chamuyera (Polyglot Meeting), y funciona todos los martes en Corrientes 1380, de 21 a 24.

La consigna que el grupo anuncia en la web es la de “juntarse a practicar idiomas”, e incluye, además de inglés y español para extranjeros, francés, alemán, italiano y portugués.

A diferencia del Barlingual, en La Chamuyera no se paga entrada, sólo se abona lo que se consume; pero todos deben consumir algo para acceder al evento.