Desde la Unión Obrera Metalúrgica (UOM) salieron a denunciar este jueves un masivo despido de la empresa Techint, en su planta de la ciudad bonaerense de Campana. Se habla de 189 trabajadores cesanteados, por lo que el gremio se declaró en estado de alerta y anunció que se reunirá en las próximas horas con el ministro de Trabajo de la Nación, Jorge Triaca.

Abel Furlán, secretario general de la UOM Campana-Zárate, informó que los despidos se registraron luego de duras negociaciones con el grupo empresario, que había propuesto mantener el total de los trabajadores pero con una drástica disminución salarial.

El dirigente aseguró también que la medida de la compañía se hizo oficial a través de telegramas y corresponden a la planta de Tenaris Siderca, a la vez que anunció que este viernes acudirán a una audiencia con el nuevo ministro de Trabajo de la Nación, Jorge Triaca, para buscar que se dicte una conciliación obligatoria.

Esta semana había trascendido que entre 400 y 600 obreros de la empresa Siderca podían perder sus puestos de trabajo o ver reducidos sus ingresos, si la UOM no firmaba la renovación de un acuerdo establecido por trabajadores suspendidos.

Conflicto prolongado

El conflicto entre el mayor grupo empresario del país y uno de los principales gremios industriales comenzó estos días porque venció un acuerdo vigente desde abril por el cual Siderca, del grupo Techint, le pagaba el 80 por ciento del sueldo a los suspendidos como consecuencia de la caída del precio internacional del petróleo.

Siderca aplicó desde abril de este año un método de suspensiones rotativas según el cual entre 400 y 600 trabajadores permanecen siempre fuera del lugar de trabajo con el 80 por ciento del salario normal.

Se trata de un acta por seis meses que se renovó en octubre por dos meses más, pero ese convenio venció esta semana y para renovarlo pretendían pagar sólo el 60 por ciento del salario.

Techint tendría la intención de desprenderse del 20 por ciento de su plantilla de Siderca, en caso de no alcanzar el acuerdo exigido por la patronal.

En este contexto, Abel Furlán ya había reconocido que sin el acta de suspensiones no se descartaba que pudiera “llegar a haber despidos, que es lo que la empresa ha venido buscando hasta ahora".

En Siderca trabajan 2.700 personas de forma directa y más de 3.000 si se cuentan los contratados, mientras que en el orden nacional en la actualidad el sector metalúrgico tienen 300.000 empleos contra los 200.000 de la década del noventa.

Acerca de una devaluación del peso, que al comienzo de la semana ya era una opción palpable, Furlan estimó que para el Grupo Techint, como empresa exportadora, equivale a reducir costos en dólares (el salario y las demás erogaciones que realiza en pesos) e inflar los ingresos medidos en pesos".

Siderca vende los tubos a las petroleras y, en una parte pequeña, pudo reemplazar clientes del exterior por otros del ámbito local, en donde la actividad no declinó, aunque la magnitud del sector en el país es muy reducida en función del mercado de Techint en el mundo.