Empezar la universidad significa un año de cambios radicales. De pronto, el estudiante que sale de un entorno más chico, familiar, ingresa en un mundo adulto donde debe tomar decisiones con madurez y autonomía y organizarse de la mejor manera para poder atravesar el año con éxito.

A partir del momento en que el alumno se vuelve universitario debe hacerse responsable de sus asignaturas, exámenes y trabajos y pareciera una tarea imposible. Sin embargo, sobrellevar  la universidad es una cuestión de organización, previsión, paciencia y esfuerzo.

Es importante aprender a equilibrar las horas de estudio y trabajo con las de diversión y ocio. Acá tenés algunas de claves para ello:

Asistencia a clase

Una vez que llegas a la universidad, es muy tentador faltar a clase, sin embargo, tendrás que concurrir a tus asignaturas y, aunque haya profesores que no te gusten y asignaturas que te parezcan aburridas, tus posibilidades de éxito en la universidad aumentarán si vas a clase y prestás atención.

Apuntes limpios

Las notas serán la herramienta de trabajo más importante, así que te recomendamos ir a clase con frecuencia y anotar lo que los profesores explican. Muchas veces será necesario complementar la información con los libros. Incluso te aconsejamos que vistes la biblioteca para realizar lecturas necesarias y de este modo no atrasarte. A su vez, en la medida que sea posible, conseguí los libros lo antes que puedas para asegurar el cumplimiento de las tareas.

Horarios de estudio

Una agenda para organizar tu tiempo es lo más recomendable. Asegurate de anotar los horarios de tus clases teóricas y prácticas y de tus actividades fuera de la universidad. Cuando termines esto, buscá horas y días libres en las que puedas estudiar con calma. Nosotros te recomendamos la agenda, pero lo importante es que busques un sistema que funcione para ti y utilízalo desde el primer día.

Cero distracciones

Encontrar un lugar para concentrarte es fundamental. Podés visitar la biblioteca por ejemplo, pero debés apagar tu celular, para no caer en la tentación de los chats, los mensajes y la conexión a Internet.

Tener un buen descanso

Tenés que aprender a equilibrar el estudio con el descanso. Al igual que no podés matarte trabajando en las fechas de exámenes, no podés dormir poco en épocas de relax. Tanto la mente como el cuerpo necesitan divertirse. Estudiá, salí y divertite, sin poner en riesgo tu salud.

Vida universitaria

El hecho de ser universitario significa más que estudiar y salir de fiesta. Muchas universidades tienen asociaciones de estudiantes, clubes deportivos, escuela de idiomas. Organizá bien tus horarios y disfruta de las distintas actividades, en las que también conocerás a gente nueva.

Fuente: Noticias Universia