La ciudad de San Lorenzo sigue agitada por los hechos que derivan de la desaparición de la joven Paula Perassi y por el procesamiento de todos los imputados que dictaminó el juez Juan José Tutau. Este miércoles, la policía constató dos hechos de amedrentamiento en una propiedad de la familia: en las primeras horas del día el padre de la víctima denunció que habían roto los cristales de su taller mecánico, mientras que horas más tarde encontraron una cruz rudimentaria atravesada en las rejas de la puerta del mismo inmueble. Por todo esto, los fiscales de la causa ordenaron una custodia policial permanente en el lugar que reside la familia.

Uno de los abogados de la familia Perassi, Adrián Ruiz, confirmó en el programa Hoy es siempre todavía, de Radio 2, que se encontró “una cruz como símbolo de amenaza en la puerta” del taller de Alberto Perassi, que está justo en frente de la vivienda familiar.

Ruiz detalló que se trataba de “una cruz rudimentaria, con un claro fin de amedrentamiento”. Además, el profesional adelantó que “los fiscales dispusieron una custodia policial especial en el frente de las propiedades de la familia”.

“Esto no lo tomamos sólo como amenazas a la familia Perassi; también son mensajes entre las personas que se encuentran detenidas porque no tenemos que perder de vista que estamos ante una auténtica organización criminal”, señaló el abogado.

“Estamos hablando de una asociación criminal que tiene patas en la sociedad civil pero también en la Policía”, agregó. Cinco de los ahora ocho procesados son efectivos policiales, tal cual advierte el papá de Paula desde los primeros días de búsqueda. Ahora, los representantes legales de la familia van por el arresto de otras cinco personas más.

Este lunes se cumplieron 3 años y 8 meses desde que se la se vio a Paula con vida por última vez. Desapareció el 18 de septiembre de 2011.

Procesamiento y después

Las amenazas se produjeron a horas de conocerse la decisión del juez Tutau de procesar –tal cual solicitó la Fiscalía– a todos los imputados en la causa. En total son ocho, cinco policías y tres civiles entre los que se cuentan al amante de Paula y padre del bebé que llevaba en el vientre, Gabriel Strumia; su esposa, Roxana Michl y una segunda mujer que habría realizado el aborto. Los fiscales Donato Trotta y Román Moscetta abonan la hipótesis de que la mujer fue secuestrada y obligada a interrumpir su embarazo con un método que finalmente la condujo a la muerte.

La decisión del magistrado se conoció este martes desde los tribunales de San Lorenzo, donde muchas veces Alberto y su esposa Alicia se encadenaron para pedir justicia.

Los procesados son: Strumia, Michl, Mirta Rusñinsky; y los agentes, Aldo Gómez, María José Galtelli, Adolfo Puyol, Jorge Enrique Krenz y Ramón Godoy.

“Acá tiene que actuar el Ministerio Público de la Acusación”, exigió el abogado Adrián Ruiz. “Los fiscales nos tienen que demostrar si este nuevo sistema procesal penal sirve para agarrar rateros o para actuar en casos de organizaciones criminales como éste”.

“Estamos hablando de una organización que goza de mucha impunidad, que mueve muchísimo dinero. No nos extrañaría que las amenazas sean para la familia Perassi pero a la vez también para la Justicia y para el interior mismo de esta asociación ilícita”, concluyó Ruiz.