Un cura de Catamarca fue arrestado este martes tras ser denunciado por abuso sexual a una adolescente de 16 años. Se trata del párroco de Nuestra Señora de Belén, Juan de Dios G., acusado de manipular y acosar de una joven repetidas veces en su propio despacho de la parroquia y violarla un día de septiembre en el hipódromo local. Hacía un año que trabajaba en la diócesis.

“Todo pasó el 21 de septiembre, ella se escapó de la casa a las dos de la mañana y él llegó a mi casa disfrazado con un casco y una campera que nunca usaba. La volvió a traer a las siete de la mañana”, contó la madre de la muchacha, Alejandra Carrizo, a Infobae. Esa noche el abuso habría llegado al extremo pero los ultrajes databan de largo.

Carrizo se enteró de buena parte de ellos a través del Facebook de la joven, la semana pasada cuando estuvo internada por una crisis nerviosa. La adolescente había dejado abierta la red social y su madre leyó entonces una serie de chats que explicaban el comportamiento extraño de su hija el último tiempo. Luego, descubrió cartas, fotos y tarjetas que desnudaban la obsesión del sacerdote por la muchacha.

Y es que hacía tiempo que su hija no era la misma. A fines del año pasado, la adolescente había comenzado a asistir a un grupo denominado Jóvenes Unidos por el Amor a Cristo, dirigido por el cura G.

Algunos meses después de que la chica se uniera al grupo, Carrizo notó los primeros cambios: “Empecé a verla sin ganas de comer, con vómitos, tenía síntomas de bulimia. Después empezaron los cortes, los intentos de suicidio y todo esto yo notaba que pasaba cada vez que venía del grupo”, contó.