La enfermedad diverticular puede ubicarse en cualquier segmento del Colon, pero en la mayoría de los casos afecta al Colon Sigmoides.

Los divertículos son pequeñas bolsas o sacos que protruyen desde la luz intestinal hacia afuera. La mayor parte de los divertículos del colon se producen por un aumento de la presión interna del colon. Esta situación, reiterada a lo largo de los años, provoca que sus capas más internas (mucosa y submucosa) prolapsen a través de los puntos de la pared intestinal más débiles y con menor resistencia, dando lugar a la aparición de divertículos. La presencia de divertículos en el colon sin participación de fenómenos inflamatorios se denomina Diverticulosis y su inflamación, Diverticulitis.

Entre el 5-10 % de la población general tiene diverticulosis colónica. A partir de los 60 años la prevalencia es del 30 % y a los 80 años del 60 %.

Más del 80 % de las personas con diverticulosis se encuentran libres de síntomas. En quienes sí aparecen síntomas, estos se deben a las alteraciones motoras propias del Colon (Hipertonía y aumento de la presión interna) y se presentan en forma de dolor abdominal continuo o intermitente, habitualmente localizado en la parte izquierda del abdomen (Fosa Iliaca izquierda), donde se ubica el colon sigmoides. Generalmente, se alivia con la evacuación y/o expulsión de gases.

La diverticulosis simple cursa, en muchos casos, con el cuadro sintomatológico del colon irritable. La consulta con el especialista de Coloproctología es necesaria y será el profesional quien establecerá el diagnóstico y tratamiento adecuado. Las dietas ricas en fibras vegetales son necesarias para mejorar la evacuación intestinal y disminuir la presión intraluminal colónica.

En algunos casos, la ausencia de un tratamiento adecuado deriva en un cuadro de diverticulitis aguda. La inflamación de los divertículos se produce frecuentemente por la retención de materia fecal en su interior, la induración de ésta va erosionando el fondo de la pared delgada del divertículo y finalmente se produce la infección por las bacterias del colon.

Esos pacientes suelen presentar dolor agudo intenso, constante, habitualmente localizado en el lado izquierdo bajo del abdomen (fosa ilíaca izquierda), con irradiación hacia la espalda y fiebre acompañada de temblor. También pueden aparecer náuseas, vómitos, signos de distensión abdominal y cambios del ritmo evacuatorio como constipación o diarrea.

En estos casos, la consulta es urgente y requiere estudios diagnósticos y tratamiento médico o quirúrgico de urgencia.