El jefe de la Policía de Rosario, Miguel Oliva, garantizó la seguridad para el banderazo el próximo jueves y también para el clásico del domingo. Sin embargo, tras el ataque a tiros contra la casa de la abuela del jugador de Newell's Old Boys Maximiliano Rodríguez este martes, pidió a los hinchas que bajen los niveles de violencia.

En diálogo con el programa Radiópolis que conduce Roberto Caferra en Radio 2, el comisario Oliva consideró: “Estamos en condiciones de enfrentar la situación”, en referencia al partido entre Newell´s y Central el próximo domingo en la ciudad.

Con respecto al banderazo organizado por los seguidores de Newell´s Old Boys para este jueves, señaló con respecto a una posible suspensión tras el ataque: “Es una facultad del club, yo puedo recomendar y garantizar la seguridad pero que traten de que no haya hechos violentos, no es una guerra el partido”, remarcó.

Oliva lamentó que “agredan la casa de la abuela de un jugador que no tiene nada que ver con el partido” y sostuvo que se trabaja en el hecho: “Estamos trabajando con la PDI, evaluando los informes periciales, recolectando vainas”. Pero, subrayó: “No voy a anticiparme”.

“Vamos a tomar las medidas necesarias para disminuir este tipo de hechos”, manifestó más adelante y en ese sentido, contó que hubo una reunión con directivos de Rosario Central y que hoy está previsto un encuentro similar con representantes del club del Parque Independencia.

“Entiendo el folclore del fútbol pero no ir a exteriorizar broncas a un estadio. Tendría que ser más familiar”, observó. Y finalizó en el mismo tono: “Que tomen conciencia (los hinchas) de que esto es un partido de fútbol”.

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Miguel Oliva (Radio 2)