La Asociación Trabajadores del Estado (ATE) y la Unión del Personal Civil de la Nación (UPCN) aceptaron el 31 por ciento de aumento que les ofreció el gobierno provincial en estas paritarias. El gremio que lidera Jorge Molina pidió que el incremento se aplique en dos veces en lugar de tres como se había planteado en un primer momento. Y en el que encabeza Jorge Hofmann las bases se habrían mostrado en contra del acuerdo al denunciar que no fueron consultadas. 

La oferta se había formalizado el viernes pasado y significa una mejora salarial promedio del 31 por ciento; para las categorías iniciales se trata de un aumento más significativo, que llega casi un 35 por ciento.

“Esto implicaría que el aumento del cuatro por ciento anunciado se adelante a marzo, con lo cual ese mes se cobraría un 22 por ciento de aumento, y el resto en julio, como se anunció”, precisó Molina, según publicó el diario santafesino El Litoral.

Por su parte, desde ATE, Hoffmann, valoró la aceptación de la oferta de parte de los trabajadores aunque advirtió que esta nueva política salarial “tendría que estar entre siete y ocho puntos por encima de la inflación estimada para este año, a fin de poder recuperar el poder adquisitivo perdido por los salarios”. Insisitió en que la provincia aplique la Ley de Defensa al Consumidor con inspecciones para evitar los aumentos desmesurados e injustificados de precios.

Los empleados públicos también cobrarán con los sueldos de febrero una suma no remunerativa, fija y por única vez de 1.200 pesos.