El juez neoyorquino, Thomas Griesa, accedió al pedido de los fondos buitre de sumar otras 49 demandas al caso que llevan adelante contra Argentina en los tribunales estadounidenses, presentadas por los denominados bonistas “me too”, con lo que el monto total de la sentencia pasa a ser de 8.000 millones de dólares. 

Con su decisión, Griesa aceptó el pedido de incluir 6.150 millones de dólares a la causa “pari passu” que, sumado al fallo de 2012 a favor de los demandantes liderados por NML.

Argentina reestructuró su deuda en default de 2001 en dos canjes en 2005 y 2010. El 93 por ciento de sus acreedores aceptaron esas ofertas de reembolso parcial con importantes quitas, pero el 7 por ciento restante la rechazó, reclamando el reembolso de la totalidad de lo adeudado más intereses.

Griesa falló por primera vez a favor de un grupo de fondos buitre en 2012 y, luego de dos años de apelaciones, la Corte Suprema de Estados Unidos confirmó la sentencia. Ahora el juez de primera instancia amplió los alcances de su fallo.