El papa Francisco comenzó a celebrar este domingo sus 81 años con el abrazo de los niños de una clínica pediátrica vaticana, antes de pronunciar el Ángelus ante las 25 mil personas que lo aguardaban en la Plaza San Pedro y que lo sorprendieron cantándole el feliz cumpleaños en italiano.

Los niños con los que el pontífice se reunió en audiencia privada en el aula Pablo VI son asistidos en el Dispensario Pediátrico "Santa Marta",
situado dentro de las dependencias vaticanas y que ofrece servicios gratuitos a menores de cinco años, en su mayoría miembros de familias
inmigrantes.   

Los niños que acudieron a la audiencia, ataviados con trajes de cocineros, le sorprendieron con un globo con forma de 81 y una enorme pizza de cuatro metros de longitud con una sola vela que el papa sopló y apagó con la ayuda de estos improvisados chefs.

Según informó Radio Vaticano, el pontífice ofreció una audiencia privada a los pequeños en la sala vaticana dedicada a Pablo VI antes del tradicional Ángelus dominical, tras el cual recibió las felicitaciones de los peregrinos de varias partes del mundo, además de la visita de chicos que llegaron para la bendición de las imágenes del Niño Dios que colocarán en sus Pesebres. 

Es habitual que el papa argentino pase el día de su cumpleaños con los más necesitados o con la juventud, según la agencia AICA.

En ocasiones anteriores, visitó a personas sin hogar o se reunió con jóvenes activista. católicos. En 2014 se celebró en su honor una "flashmob", es decir, un grupo de personas que se reúne repentinamente en un lugar, que en esa ocasión bailó tango en la Plaza de San Pedro.

El pontífice recibe su quinto cumpleaños como Papa con buena salud y trabajando con intensidad: acaba de realizar un viaje a Myanmar y Bangladés y ya se está preparando para su 22° trayecto, que lo llevará en enero a Chile y Perú. 

Hace un año, en ocasión de cumpleaños número 80, confiaba: “Desde hace unos días que me viene a la mente una palabra que puede sonar fea: vejez. Asusta. Al menos un poco. Pero si uno la ve como una etapa de la vida que sirve para dar alegría, sabiduría y esperanza, entonces recomienza a vivir”.

Párrafo aparte se lleva la torta de cumpleaños. 

El artista urbano Maupal, autor de algunos grafiti romanos sobre el pontífice, también le deseó un feliz día con un dibujo plasmado en una torta de una pastelería próxima al Vaticano y en el que se lo muestra cargando a sus espaldas un planeta agrietado y remendado.

Con su otra mano el papa sujeta una maleta en la que puede leerse la palabra "valores" y de la que asoma una bufanda roja y azul, los colores del San Lorenzo de Almagro, su equipo de fútbol.