Gendarmería Nacional, a pedido de la jueza Fabiana Palmaghini, comenzó a custodiar a Diego Lagomarsino, el hombre que le entregó el arma Bersa calibre .22 al fiscal Alberto Nisman.

Anteriormente, Palmaghini había prohibió la salida del país del colaborador del fiscal Nisman a fin de “tenerlo a derecho”, luego de “reiterados intentos por ubicarlo” en el domicilio que dio el lunes, cuando declaró voluntariamente ante la fiscal Viviana Fein.

El lunes, horas después de hallarse el cuerpo del fiscal Nisman con un tiro en la cabeza en el baño de su casa, Lagomarsino se presentó voluntariamente ante la fiscalía y declaró que el sábado le había prestado a Nisman una pistola calibe 22 similar a la que disparó la bala que lo mató.

Aseguró que el fiscal, con quien colaboraba en tareas informáticas en la Unidad Fiscal Amia (UFI-Amia), le había pedido el arma alegando razones de seguridad, lo cual desató sospechas luego de saberse que Nisman tenía dos armas registradas como legítimo usuario en el Renar.

En posteriores declaraciones periodísticas dejó trascender que al llevarle la pistola Bersa hasta su departamento del piso 13 de la torre Le Parc de Puerto Madero, éste le comentó que el desplazado jefe de contrainteligencia de la ex SIDE Jaime Stiusso le había recomendado que se cuidara de su custodia e hiciera lo mismo con sus hijas.

Lagomarsino es un informático que no integra la planta de la fiscalía sino que tenía un contrato firmado directamente por Nisman por un monto elevado en relación a las remuneraciones de otros funcionarios del Ministerio Público Fiscal.