Muchos de los síntomas del asma alérgica y del asma no alérgica son los mismos, pero los desencadenantes son diferentes. 

El asma alérgica es la forma más frecuente del asma. Sus síntomas son, casi siempre, desencadenados por la inhalación de alérgenos, sustancias generalmente inofensivas, como los ácaros del polvo o el polen. Pero, si una persona es alérgica a estas sustancias, puede presentar una respuesta a ellas, como inflamación de las vías aéreas de los pulmones. ç

Asimismo, estas alergias son cada vez más comunes, sobre todo en países industrializados. Además de la fiebre del heno,  el asma alérgica es considerada actualmente como una de las alergias más comunes. 

Problema mundial 

A nivel mundial, hay más de 300 millones de pacientes con asma. Sólo en Alemania, entre un 10-15% de los niños sufren de asma alérgica, que a menudo es debida a los contaminantes medio ambientales. Con los medicamentos disponibles en la actualidad, los síntomas se pueden aliviar con eficacia, pero sin abordar la raíz del problema, ya que las razones exactas del asma alérgica todavía no están totalmente claras. 

Para descubrir sus causas, investigadores del Helmholtz Centre For Environmental Research (UFZ) y sus colegas de laUniversidad de Leipzig, ambos en Alemania, realizaron una investigación en la que encontraron una proteína que juega un papel fundamental en el desarrollo de la inflamación por alergia de las vías respiratorias. 

El descubrimiento podría allanar el camino para nuevas terapias, ya que esta proteína también influye en la progresión de la alergia. Ha sido publicado en Nature Communications.

Papel importante del sindecán-4 

La proteína en cuestión es la sindecán-4, que se encuentra en la membrana celular de las células presentadoras de antígenos (APC), unas células inmunes que detectan sustancias exógenas (antígenos).

Los antígenos son entonces internalizados y migran a los ganglios linfáticos más cercanos, donde se les presentan a otras células del sistema inmune, las células-T. De esta manera, se inicia una reacción inmune que conduce a la sensibilización a un antígeno particular, como por ejemplo a un alérgeno del polen. 

Cuando las células T entran en contacto con dicho alérgeno surgen los síntomas típicos del asma alérgica. "En nuestro estudio, hemos demostrado que la proteína sindecán-4 juega un papel crítico en la migración de APC", explica Tobias Polte, uno de los autores de la investigación. "Cuandola  sindecán-4 es deficiente, el APC no puede encontrar su camino a las células T y, por lo tanto, no puede activarlas. Como resultado, la reacción inmune no puede tener lugar y la sensibilización a un antígeno particular cesa”. 

Los investigadores también lograron demostrar que la sindecán-4 también juega un papel central en el proceso inflamatorio del asma alérgica. Esto se descubrió a través de un experimento donde  se suministró a unos ratones  anticuerpos contra el sindecán-4. El resultado fue la mejora de los síntomas del asma alérgica. 

"En principio, la sindecán-4 sería un buen punto de partida para nuevas terapias", afirma Polte, "puesto que exhibe varias funciones en el metabolismo celular". Sin embargo, señala, los efectos secundarios potenciales son todavía difíciles de evaluar." 

Nuevas terapias de futuro 

En la actualidad, para aliviar los síntomas de los pacientes con asma alérgica, se trata la inflamación de las vías respiratorias alérgica con glucocorticoides y un aerosol broncodilatador para el asma. 

En un futuro cercano,  los investigadores seguirán usando estos tratamientos,  pero saben que para solucionar el problema hay que llegar a la raíz del mismo. 

"Solo tendremos una terapia eficaz que llegue a la raíz cuando hayamos comprendido plenamente las relaciones subyacentes al desarrollo del asma alérgica", explica Polte. "En nuestro estudio hemos sido capaces de descubrir un componente importante, la proteína sindecán-4, que debería ayudarnos en el camino a la identificación de nuevas terapias", concluye.