Sin citar sus fuentes, la BBC y el Washington Post identificaron este jueves como un súbdito británico al verdugo anónimo de acento londinense que degolló cinco rehenes ante las cámaras en sucesivos videos distribuidos por el Estado Islámico (EI).

Según la emisora pública británica, se trata de Mohamed Emwazi, súbdito británico de 27 años, nacido en Kuwait y criado en el acomodado barrio de West London.

Los servicios de seguridad del Reino Unido ya conocían a "John el yihadista", como lo bautizó la prensa, pero mantuvieron su nombre en reserva aduciendo razones operativas, informó la cadena.

Emwazi apareció por primera vez en un video en agosto de 2014, cuando aparentemente asesinó al periodista estadounidense James Foley.

Posteriormente, se lo vio en los videos del degüello del periodista estadounidense Steven Sotloff, el trabajador social británico David Haines, el taxista británico Alan Henning, el trabajador social estadounidense Abdul-Rahman (Peter) Kassig y el periodista japonés Kenji Goto.

En todos ellos, el yihadista aparecía en uniforme negro y un pasamontañas negro que le tapaba completamente el rostro salvo la nariz y los ojos. Hablaba con acento británico y antes de inicia.   .   –aparentemente– la decapitación acusaba a las potencias de Occidente por la muerte de los rehenes. Después de un corte, los videos mostraban los cuerpos sin vida y sin cabeza.

La última aparición del yihadista se produjo a principios de este mes, tras el asesinato de Goto.

Según hizo notar la BBC, Emwazi ya había llamado la atención del MI5 (la inteligencia interior británica) en 2010, cuando aparecía en documentos judiciales semisecretos que lo vinculaban a la red Al Shabab, rama de Al Qaeda que actúa en Somalía.

La red mencionada en esos documentos incluía al menos 13 varones de Londres. Dos estaban bajo arresto domiciliario, uno prófugo y otro más había muerto en un ataque con drones.

Según la BBC, amigos de Emwazi aseguraron al Washington Post que no podía tratarse de otra persona, y señalaron al estudiante de programación de la Universidad de Westminster como el mediático asesino.

Los amigos agregaron que creían que había empezado su conversión ideológica hacia el Estado Islámico durante un viaje a Tanzania en 2009, después de graduarse. Tenía la intención de ir de safari con dos amigos, pero fueron detenidos al llegar a Dar es Salaam y decidió salir del país con rumbo a Amsterdam.

De acuerdo al relato los amigos de Emwazi, el MI5 lo rodeó, acusándolo de intentar unirse al grupo Al Shabab en Somalía, lo que negó. Entonces, según el relato, los agentes de seguridad británicos intentaron reclutarlo antes de permitirle entrar al Reino Unido.

“Más tarde, Emwazi obtuvo un empleo en una empresa de computación en Kuwait, pero en 2010, durante una visita a Londres, el contraterrorismo británico –dicen sus amigos– le impidió retornar al país del Golfo Pérsico”.

"Me esperaba un trabajo, y una esposa" –escribió en un mail en 2010– pero ahora me siento preso, solo que en Londres y no en una jaula, controlado por gente de los servicios que me impiden iniciar una nueva vida en el país donde nací".

El Washington Post afirmó que se creía que Emwazi había entrado a Siria alrededor de 2012 y luego se unió al Estado Islámico.

Según el periodista de la BBC Dominic Casciani, antes de que Emwazi viajase a Siria ya era conocido por los servicios de seguridad del Reino Unido y los Estados Unidos como alguien vinculado al grupo Al Shabab.

Ni la policía británica ni la portavoz del primer ministro, David Cameron, se pronunciaron sobre las revelaciones periodísticas. En ambos casos, solo declararon que había una investigación en curso.

También el FBI se escudó este mes en la investigación en curso para negarse a dar la identificación precisa del degollador pese a que, en setiembre pasado, declaró conocerlo.

Mientras tanto, el secretario de Defensa estadounidense, Ashton Carter, se reunió hoy en Kuwait con los generales y diplomáticos de su país encargados de la misión contra el Estado Islámico, para abordar la estrategia de lucha contra los yihadistas en Irak y Siria.

Carter se reunió durante seis horas con un equipo de más de una veintena de oficiales de alto rango a los que se refirió como su "Team America" en la base militar de Camp Arifjan, última escala de su primer viaje tras ser nombrado jefe del Pentágono, informó hoy el Gobierno estadounidense.

El portavoz del Departamento de Defensa, el contraalmirante John Kirby, subrayó, citado por la agencia de noticias Efe, que "el Estado Islámico es una gran amenaza para la región y es necesario trabajar con países aliados y agencias" para acabar con ese problema.

En el cónclave se encontraban presentes el general Lloyd Austin, jefe del Mando Central, encargado de las operaciones militares en Medio Oriente y el enviado presidencial para la misión contra el EI, John Allen.

Carter también incluyó en su ronda de reuniones a oficiales militares pertenecientes a países de la coalición internacional contra el Estado Islámico, en la que participan más de medio centenar de naciones en diferente grado de implicación.

Pese a que Irak es un país aliado en la guerra contra el Estado Islámico, Carter no se detuvo en Bagdad, que espera poder iniciar la toma de Mosul, segunda ciudad de Irak y capturada por el EI en junio de año pasado, en abril o mayo, con la participación por tierra de hasta 25.000 soldados iraquíes y kurdos y el apoyo desde el aire de la coalición encabezada por Estados Unidos.