El Concejo Municipal encara este jueves su última sesión ordinaria del año y tiene en carpeta un par de temas polémicos que el oficialismo espera aprobar antes de la renovación del cuerpo legislativo. Por un lado, el Presupuesto 2016, que como detalle más candente contempla un revalúo –además del ajuste inflacionario– de la Tasa General de Inmueble (TGI); y por otro, el nuevo pliego del transporte urbano de pasajeros.

Ambos proyectos deberán superar primero la instancia de debate en sus respectivas comisiones, encargadas de dar o no el despacho para su posterior tratamiento en el recinto.

Los últimos días fueron de intensas negociaciones por parte del socialismo y sus aliados para lograr el consenso necesario y aprobar el Presupuesto para el año próximo, nuevamente con Mónica Fein a la cabeza del Ejecutivo. Sin embargo, se presenta con moderadas expectativas ante sus últimas chances.

La presidenta de la Comisión de Presupuesto, la radical Daniela León, se expresó optimista y cree que el texto va a contar con el aval para debatirse sobre tablas. Sin embargo, desde sectores de la oposición directamente descartan esa posibilidad. “Es una discusión que está verde y no hay ninguna chance de que sea discutido y aprobado esta semana”, sentenció en Radio 2 el edil del PRO Roy López Molina.

Sin embargo, aclaró que no por esto la responsabilidad del tratamiento pasaría al nuevo Concejo, que renueva parte de sus bancas en pocos días. “Es probable que se pueda discutir la semana que viene”, probablemente el miércoles 9 –luego del doble feriado–, en una sesión extraordinaria, ya que se trata de “una herramienta fundamental de gobernabilidad”, expresó.

Para eso, el edil macrista llamó a seguir puliendo, sobre el plan económico para 2016, no sólo el aumento y el eventual revalúo de las propiedades inmobiliarias por zona, como pretende el municipio, sino también el gasto y el endeudamiento de la administración local, algo que para López Molina no se está atendiendo como corresponde.

En ese sentido, en el programa Hoy es siempre todavía, pidió avanzar hacia “un Presupuesto actualizado pero con soluciones concretas para los rosarinos”.

El proyecto de la intendencia

El Presupuesto 2016, que será de 9.500 millones de pesos, contempla como dato saliente un revalúo fiscal a la hora de ajustar la TGI, como ya se intentó –sin un resultado positivo– dos años atrás, con la idea de implementar “un mecanismo equitativo” que fije tarifas “según el valor de la propiedad”, sostuvo oportunamente Mónica Fein.

En caso de prosperar la idea, desde marzo próximo se pagarán subas de un 50 por ciento promedio en la tasa inmobiliaria, incremento que se aplicaría por sectores y se dividiría en seis radios determinados, como dos semanas atrás adelantó El Tres.

La reunión de la Comisión de Presupuesto y Hacienda para este jueves está prevista para las 9.15, mientras que un eventual debate en el recinto se prevé para la tarde, en una sesión que podría ser maratónica.

El nuevo pliego del transporte, otra asignatura caliente

En tanto, a las 10 comenzarán a trabajar las comisiones de Planeamiento y de Gobierno, esta última a cargo de otro tema crucial como el de los nuevos pliegos para llamar a licitación el sistema de transporte público.

La de este asunto “ha sido una muy buena discusión”, ya que “ha pasado por muchas comisiones” y se fue refinando el texto que lograría el despacho para ser votado luego, según analizó, también en Radio 2, la concejala radical María Eugenia Schmuck.

Remarcó la importancia de tener “un pliego de licitaciones lo más pronto posible para que pueda convocarse –a los oferentes– y empezar a mejorar el sistema”.

Finalmente, otros de los temas en la última sesión ordinaria en el Palacio Vasallo son la prórroga por otro año en la exención de pagar la TGI a todos los inmuebles afectados por la explosión de Salta 2141, en agosto de 2013, y también una iniciativa para elevar las multas y períodos de inhabilitación a quienes corran picadas ilegales en Rosario.

También se esperaba la aprobación de la ordenanza de convenios urbanísticos para el ámbito productivo, que no solamente brindará un marco regulatorio claro a los emprendimientos de esta índole, sino fundamentalmente establecerá una serie de beneficios importantes para la radicación de industrias en la ciudad.