La tradicional marcha de cierre del Encuentro Nacional de Mujeres que se realizó este domingo tuvo un capítulo negro cuando agentes de la Policía de Santa Fe reprimieron a un grupo de manifestantes que, vestidos de negro y a cara cubierta, tiraron piedras contra la Catedral. Hubo 17 personas heridas, entre ellos dos periodistas y seis policías. También se registraron disturbios en el centro donde se contaron daños al mobiliario público y a algunos comercios de la peatonal Córdoba. Por otro lado, agentes de Tránsito no cortaron todas las calles del recorrido y hubo incidentes con automovilistas que cruzaron por medio de las columnas.

Los disturbios se registraron este domingo alrededor de las 21 cuando la primera parte de las mujeres ya había llegado al Monumento Nacional a la Bandera –punto final del recorrido que comenzó a las 18 en Plaza San Martín– pero el resto todavía marchaba por calle Santa Fe.

Un grupo de hombres y mujeres con sus rostros ocultos arrojaron piedras y botellas contra el ingreso del templo mientras, debajo de las escalinatas de la Catedral, cerca del Pasaje Juramento, unos 20 hombres rezaban el Padre Nuestro y el Ave María. Para muchos, una provocación.

Los uniformados entonces reprimieron con balas de goma pero los cascotazos continuaron. Y las balas también. En el aire, además, se sentía el olor característico de los gases lacrimógenos. Diez manifestantes, tres periodistas y seis policías resultaron lastimados. Entre los uniformados, había tres agentes mujeres y un jefe del Cuerpo Guardia Infantería. Un policía del Comando fue lesionado con una bala de plomo en la región lumbar. 

Las mujeres tuvieron que frenar y retomar la marcha y algunas agrupaciones incluso se retiraron del recorrido. Hubo mucha confusión.

La menor parte de las manifestantes permanecieron en el Monumento y hacia las 23 la Policía continuaba apostada en la zona de la Catedral que estaba vallada y su estructura cubierta en parte con un plástico.