Una joven turca de 19 años pelea por su vida tras ser baleada en el cráneo por haber participado de un concurso de canto y provocado así el rechazo de la comunidad tribal de la que forma parte. Mutlu Kaya había brillado en la versión turca de “Talento Argentino” y pensaba iniciar su carrera musical con la ayuda de Sibel Can, una famosa cantante pop turca. Pero sus sueños se estropearon una noche en la que su ex novio y otras tres personas abrieron fuego sobre su cabeza. Los cuatro están detenidos. Cada año entre 200 y 250 mujeres turcas son asesinadas en nombre del “honor” de sus familias. Sólo en los cuatro primeros meses del 2015 se registraron 94 femicidios de este tipo en dicho país.

Según informó EFE, Kaya está crítica internada en un centro de salud de Diyarbakir, en el sureste de Turquía. De acuerdo a la prensa local, había recibido amenazas de muerte en abril pasado por aparecer el mes anterior en el certamen de música. Esos mensajes habrían provenido de familiares de su padre que no veían con buenos ojos sus aspiraciones artísticas.

Tales amenazas parece que se concretaron en la madrugada de este lunes, cuando una persona no identificada entró en el jardín de su casa y le disparó cuando ensayaba en su habitación.

En las zonas del sureste de Turquía son especialmente frecuentes los llamados "crímenes de honor", es decir, asesinatos de mujeres jóvenes cometidos por los propios familiares –hermanos, padres, tíos o incluso la madre– para evitar que una conducta que consideran "indecente" y que deja a la familia en mal lugar frente a los vecinos.

Entre un 15 y un 20 por ciento de los asesinatos de mujeres con motivos patriarcales en Turquía los cometen los propios familiares, mientras que un 66 por ciento es obra de maridos, exmaridos, novios, exnovios o pretendientes, según recuentos de la revista Bianet.