El canotaje argentino vivió el pasado martes una gran jornada en los Juegos Panamericanos de Toronto, ya que obtuvo tres medallas, entre ellas, una dorada a manos del binomio Ezequiel Di Giácomo – Rubén Rézola en el K2-200 metros.

El rosarino Di Giácomo visitó el estudio de De 12 a 14 y manifestó que romper la maldición de conseguir el primer puesto para Argentina después de 12 años hizo que el logro valga “mucho más”.

A su vez, el deportista adelantó que el próximo objetivo personal es competir en los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro 2016. Para eso, viajará junto con su pareja de competencia, Miguel Correa, a Milán, donde disputarán el Mundial en el que deberán ubicarse entre los seis mejores. “La última vez quedamos séptimos. Tenemos chances pero no es fácil”, concluyó.