“¿Quién está haciendo lío?”, dijo el presidente Mauricio Macri en tono paternal al abrir la puerta del Salón Blanco para sorprender a un grupo de alumnos del Jardín del Manzano, del barrio Monserrat y de la escuela Banderita de la Villa 31 de Retiro, ambos de la ciudad de Buenos Aires.

“Es Macri, es Macri”, gritaron algunos de los 45 niños de primer grado que se encontraban recorriendo la Casa de Gobierno en el marco del programa Escuela Abierta de la ciudad de Buenos Aires, como parte de las actividades que impulsan 90 escuelas de la Ciudad durante el verano.

Los pequeños no ocultaron su sorpresa al ver de cerca al Presidente conversando con ellos, los maestros y las guías del grupo, Karina y Marcela, empleadas del Museo de la Casa de Gobierno.

A Macri le salió el instinto futbolístico y les preguntó cuántos eran de Boca y cuántos de River, y las manos se levantaron casi por mitades. “Veo que viene bastante parejo en estos cursos”, señaló el jefe de Estado y luego preguntó a qué escuelas pertenecían y a muchos de ellos él nombre y la edad.

Luego, Macri se prestó a la toma de fotos y a seguir dialogando con ellos, a responder preguntas y poco después explicó que debía volver su despacho para continuar trabajando.

La cara de los pequeños reflejaba la sorpresa de ver al Presidente en trato con ellos, en un diálogo cercano e informal.

Cabe destacar que en la ciudad de Buenos Aires, 90 escuelas forman parte del Programa Escuela Abierta y reciben a más de 18 mil chicos de nivel inicial, primario, medio, especial, de educación hospitalaria y en contexto de encierro.

Es una colonia de vacaciones que incluye trayectos educativos en la que los contenidos se plantean de forma lúdica y se desarrollan actividades de esparcimiento.