El programa de Protección de Testigos avanzó esta semana en la Legislatura y podrá convertirse en ley. Para el subsecretario de Derechos Humanos de la provincia de Santa Fe, Ramón Veron, “es un paso gigantesco para avanzar en causas donde los testigos pueden sentir cierta desprotección”.

El proyecto ya cuenta con media sanción en Diputados y apunta a establecer por ley un dispositivo de preservación de quienes declaren en causas penales como testigos o querellantes y se sientan amenazados.

“Es un paso importante en seguridad”, puntualizó el funcionario provincial y ex detenido político en la última dictadura.

“Quienes hemos declarado en causas contra los genocidas de la dictadura hemos recibido la contención provincial con el programa de protección a testigos”, explicó Verón y “ahora que haya una ley es una paso gigantesco”, añadió.

El funcionario recordó así la implementación de la Unidad de Protección de Víctimas, Testigos y Querellantes para juicios de lesa humanidad, para testigos y querellantes.

Los mecanismos de protección refieren a seguridad, como también asistencia integral, de carácter social, psicológico, médico.

El proyecto lleva años de discusión en la Legislatura pero en las últimas semanas se alcanzó consenso entre los distintos bloques y el Poder Ejecutivo. “Este programa es una herramienta de suma importancia para poder garantizar la integridad de quienes puedan testificar para esclarecer un delito. Sabemos que en muchos casos hay mucho temor a las represalias y eso hace que los testigos guarden silencio. El  silencio es impunidad y la impunidad aumenta la sensación de inseguridad, por lo que nuestro deber es resguardar a las víctimas para no caer en esto”, definió el vicegobernador Jorge Henn.