Con dos días de demora, el gobierno nacional prorrogó el impuesto a la venta de autos de alta gama cero kilómetro, pero con una actualización de la base imponible y una reducción de las alícuotas para los autos, utilitarios y camiones de origen nacional.

El Ejecutivo subió un 15% la base impositiva para no afectar la producción nacional, algo que reclamaban las automotrices.

Así, el decreto 1243/2015 deja transitoriamente sin efecto el impuesto para aquellas operaciones cuyo precio de venta, sin considerar impuestos, incluidos los opcionales, sea igual o inferior a 225.000 pesos. Asimismo, aquellas operaciones cuyo precio de venta supere este tipo estarán gravadas por una tasa del 10 por ciento.

Además, el gobierno nacional subió el piso impositivo para los autos de gama media. Según la resolución, aquellas operaciones cuyo precio de venta esté entre los 225.000 y los 278.000 pesos estarán gravadas con una tasa del 30%, con excepción de aquellos de origen nacional donde la tasa será del 10%.

En el segmento "alta gama", los autos que superen los 278.000 pesos, será de aplicación la tasa del 50%, con excepción de aquellos vehículos de origen nacional donde la tasa será del 30%, según explica la resolución que lleva la firma de la presidente Cristina Kirchner y los ministros Axel Kicillof y Débora Giorgi (Economía e Industria respectivamente) y del jefe de Gabinete, Aníbal Fernández.

El impuesto que estuvo vigente hasta el martes de esta semana se instrumentó en enero de 2014, con el objetivo de frenar el fuerte drenaje de dólares que generaba la venta de autos importados.