Comenzaron las obras correspondientes a la primera etapa del Movibus Norte, el carril exclusivo de la avenida Alberdi. La gerenta del Ente de la Movilidad (EMR) adelantó que se contemplarán paradas para taxis y señaló que el sistema no está pensado para que circulen bicicletas. El corredor podría ser inaugurado en el verano.

En diálogo con el programa A Diario (Radio 2), la gerenta del EMR, Mónica Alvarado, manifestó que el Movibus Norte no achicará la avenida Alberdi y explicó que quedará reservado el corredor del centro para los colectivos. A su vez, indicó que los otros dos carriles serán para vehículos particulares y taxis.

En tanto, la funcionaria municipal expresó que habrá un cambio en el estacionamiento. “En las dársenas se podrá estacionar a 45 grados pero de frente y no de culata. De esta manera no se entorpece el tránsito”, agregó.

“El carril después se va a extender a Roundeau y por San Martín, hasta el Hospital Eva Perón de Granadero Baigorria. En total el Movibus Norte tendrá 9 kilómetros; en la primera etapa se harán 2,4 kilómetros”, apuntó Alvarado.

Además, la gerenta del Ente de la Movilidad dijo que la obra no contempla la circulación de bicicletas. Y que trabajan desde el Ejecutivo local para hacer paradas para taxis sobre el margen derecho de la arteria.

Las obras

Las tareas que se llevarán a cabo en la arteria incluyen la ejecución de estaciones para la espera del colectivo, la reconversión del área comercial con reacondicionamiento de las veredas, potenciación de la iluminación y reposición e instalación de nuevo mobiliario urbano en el tramo de la avenida.

La primera etapa de obras comprende la creación de 2,4 kilómetros de carril exclusivo, que se extiende desde calle Salta hasta Portugal. 

Comerciantes quieren despejar sus dudas

Los titulares de los negocios que están ubicados sobre la avenida Alberdi buscaban aclarar sus dudas con autoridades municipales. El comerciante Ciro Rizzi comentó a la periodista Evelin Machain (Radiópolis, Radio 2) que la obra “incomoda” a los clientes, por lo que temen que eviten pasar por la arteria y que así bajen las ventas.

“La idea es que no haya inconvenientes, queremos conocer los plazos de obra para optimizar los tiempos. Queremos coordinar las fechas puntuales de venta para que no haya incordios”, concluyó Rizzi.