Cinco personas heridas, dos de ellas de gravedad, y al menos 50 disparos fue el saldo de un enfrentamiento registrado este sábado al mediodía en las inmediaciones del camping que el Sindicato de Camioneros posee entre las localidades de Pérez y Funes. Cuatro micros fueron baleados, lo que motivó un impresionante despliegue policial. Los lesionados tienen entre 29 y 40 años y fueron trasladadas con distintas heridas a centros de salud. Tres fueron dadas de alta y dos estaban en estado grave en el Hospital de Emergencias Clemente Álvarez (Heca).

El fiscal Adrián Spelta afirmó que se trató de una "interna". Desde el gremio lo negaron y dijeron que "no hubo afiliados involucrados".

En paralelo a ese hecho, en la sede céntrica del gremio también hubo incidentes en un presunto intento desalojo del titular local Marcelo Dainotto. No fue casual. En la polémica asamblea se decidió suspender al secretario general y también al tesorero Miguel Angel Caichiolo del sindicato en Rosario para auditar las cuentas. La medida regiría -si no es anulada- hasta el 17 de mayo.

El violento cruce se registró en el marco de esa asamblea, que tenía como objetivo revisar el balance anual de camioneros en el camping, ubicado en el denominado camino viejo a Funes. Cerca del mediodía, según las primeras informaciones, una combi interceptó a cuatro micros que se retiraban del lugar y sus ocupantes descargaron una feroz balacera, que dejó grandes orificios en la chapa y en el parabrisas.

Dos de las cinco personas heridas fueron derivadas al hospital Centenario y otras tres al Heca. En éste último centro de salud estaban internados con pronóstico reservado un joven de 31 años con un disparo en el adbdomen y otro de 27 con lesiones en cuello, tórax y adbomen. Los otros fueron dados de alta por la tarde.

Inmediatamente se convocaron una gran cantidad de móviles policiales al lugar, y también acudió el fiscal de turno, Adrián Spelta, quien realizaba las actuaciones de rigor. Todo se desarrollaba en un marco de gran hermetismo.

El abogado de la CGT Rosario, Siro Quagliati, afirmó a Rosario3.com que la balacera ocurrió a dos kilómetros del lugar, negó que haya afiliados del sindicato involucrados y dijo que los "muchachos de los colectivos no eran camioneros". 

La periodista Fernanda Rubio, del Tres, informó desde el lugar de los hechos que los tres colectivos quedaron perforados por la balacera y había unsa 50 vainas de proyectiles de calibre 9, 22 y 38 milímetros, en un trayecto de 100 metros.  

Mientras tanto, se produjeron incidentes en la sede céntrica del sindicato de camioneros de Rosario, en Pasco y Sarmiento. De acuerdo a lo manifestado por comerciantes del lugar, un grupo de personas ingresó al edificio y sacó a empujones al titular local del gremio, Marcelo Dainotto. Allí también se concentraron varios móviles policiales para normalizar la situación.

El origen de la disputa

El abogado de la CGT Rosario, Siro Quagliati, que ofició de representante legal de la asamblea, afirmó que en el predio al oeste de Rosario se hizo una reunión de comisión directiva de Camioneros. Allí se definió auditar los números del balance del sindicto local, ante supuestas irregularidades. Negó que se haya intervernido o desplazado a Daintto, sino que se lo suspendió para realizar el control .

Por otro lado, desde el entorno del secretario local desmintieron que haya sido golpeado y retirado por la fuerza de la sede; aunque testigos dijeron haber visto esa acción violenta.

Los ocupantes de los tres colectivos habrían llegado al predio para ingresar a la asamblea. Según versiones no oficiales, no pudieron hacerlo por los controles. El tiroteo se registró afuera del lugar.

Crimen de Beroiz, el antecedente

El enfrentamiento entre sectores internos de Camioneros en Santa Fe tiene como antecedente el crimen del tesorero de la Federación nacional del gremio, Abel Beroiz, ultimado a balazos la madrugada del 27 de noviembre de 2007 cuando subía a su automóvil en el estacionamiento del Automóvil Club de Rosario.

Por ese hecho la Justicia rosarina condenó a prisión perpetua al sicario contratado para matar a Beroiz, Raúl Flores; y a Juan Carlos Dell Arciprette, Alejandro Lázaro y Julio César Gerez.

Los dos primeros eran dirigentes del sindicato y estaban enfrentados a Beroiz, por entonces mano derecha de Hugo Moyano, informó Télam. Gerez, en tanto, es un abogado que facilitó a los gremialistas el contacto del sicario que disparó contra la víctima.