Una mujer libia, que pocas horas antes un barco de la ONG SOS Mediterranée había rescatado tras estar dos días a la deriva en el Mar Mediterráneo, dio a luz a su bebé de 2,800 kilos a bordo del buque Aquarius en aguas internacionales y lo bautizaron Miracle, Milagro en inglés.

La mujer, en avanzado estado de gestación, fue rescatada este sábado en una lancha neumática junto con otros 68 inmigrantes por un barco de la Marina italiana y después trasladada al Aquarius, donde comenzó a sentir las contracciones del parto.

"Para ser el primer hijo de la mujer, sucedió muy rápido. Los dolores comenzaron por la mañana temprano, pero después de algunas horas de parto, nació. Tanto el niño como la madre están muy bien", explicó la partera del Médicos Sin Fronteras, Amoin Soulemane, según informó el diario El Mundo, de España.

Ya a salvo en Catania, Italia, la mujer le relató a los voluntarios que estuvo un año en Libia como prisionera en un campo, donde recibió poco alimento, la maltrataron y le pidieron dinero para liberarla. Finalmente, logró escapar con a su pareja a principios de este año.

Desde entonces estuvieron escondidos en casa de un amigo en Libia hasta que se embarcaron el jueves pasado con destino incierto.

"Esa barca salió el miércoles, pero el motor se rompió y tuvieron que volver. Los traficantes les dijeron que se escondieran en la playa, luego desaparecieron y durante 24 horas no regresaron. En ese momento ella se quedó allí, aterrorizada y sin comida, ni agua", contó una de los voluntarias de Médicos sin Fronteras, Ni Mhurchu, que habló con la mujer durante el traslado.

"La situación en Libia es extremadamente peligrosa para los refugiados y los inmigrantes, que tienen poco acceso a tratamiento médico. Si hubiera entrado en trabajo de parto 48 horas antes, habría dado a luz al niño en un escondite en una playa en Libia, sin ningún tipo de ayuda médica", dijo Ni Mhurchu.

En la cuenta de Twitter de la ONG SOS le dieron la bienvenida al mundo al pequeño Miracle con fotos y videos de la gente cantando y bailando. "Los 70, entre ellos el pequeño Miracle, llegaron bien a Catania", informaron.