Mauro Mansilla, el policía que este martes fue baleado en la cabeza por un delincuente en pleno centro este martes en el centro de la ciudad murió en el amanecer de hoy en el Hospital de Emergencias Clementa Alvarez (Heca). Mansilla tenía 33 años y llevaba seis en la fuerza.

El agente fue baleado cuando buscaba a un ladrón que había cometido un delito en el centro. Al llegar a un instituto terciario de Corrientes al 300, el delincuente sorprendió al agente y le disparó en la cabeza.


De acuerdo a lo que detalló el periodista Hernán Funes en Hoy es siempre todavía (Radio 2), el policía recibió el alerta de transeúntes que vieron escapar a un hombre después de cometer un delito en pleno centro de la ciudad.

Al llegar al CES, un instituto terciario de Corrientes al 300 (entre Tucumán y Catamarca), el delincuente, que estaba oculto en las escaleras, sorprendió al oficial y le disparó en la cabeza. La bala entró por la sien, sin orificio de salida. El policía estaba allí porque realizaba adicionales en la proveeduría de la Asociación Empleados de Comercio, ubicada en esa cuadra.

El uniformado, que es un sumariante de la comisaría 3ª, fue trasladado en ambulancia al Heca, donde intentaron salvarle la vida con una intervención quirúrgica. Pero ya anoche se informó que el cuadro era irreversible y horas después murió.

En el lugar del hecho trabajaron el fiscal de la Unidad de Homicidios, Ademar Bianchini y se desplegó un amplio operativo para dar con el autor del disparo, que continuaba prófugo.