Una mujer, de 68 años, confesó en su diario haber matado a diez personas en los últimos 20 años. Para más datos, se sospecha que esta despiadada nona, una vecina de San Petesburgo, Rusia, también descuartizó a sus víctimas.

Tamara Samsonova, la septuagenaria de marras, confesó su último crimen tras haber sido detenida por la policía, acusada de haber matado a Valentina, una amiga de 79 años.

La asesina describió cómo envenenó a la mujer, arrastró el cuerpo hasta el baño, lo descuartizó y lo embolsó.

Las cámaras de seguridad del edificio donde vive registraron el momento en el que la anciana se deshacía de los restos de Valentina, la víctima.

Los vecinos contaron al diario Komsomolskaya Pravda que Samsonova estuvo internada, recientemente, en un hospital psiquiátrico durante unos cuantos meses.

Se sospecha que la abuela sería la responsable de unas diez muertes. En su diario, la mujer revela detalles de tales muertes en tres idiomas: inglés, ruso y alemán.

Sin embargo, no está claro si se trata de pura ficción o de hechos concretos.

Tamara le dijo a la policía que ella solía trabajar, en la ex URSS, en un hotel hoy conocido como Grand Hotel Europe, que era visitados por turistas extranjeros. De allí la capacidad para manejar varios idiomas.