El Ministerio de Salud de Santa Fe, a través de la Dirección de Promoción y Protección de la Salud, confirmó que entre 1° de enero y el 30 de marzo de este año, se notificaron 331 casos de síndromes febriles en todo el territorio provincial, procedentes de diferentes efectores públicos y privados.

Del total de los casos notificados, 85 son sospechosos, 34 confirmados, 25 probables y 26 descartados, mientras que el resto continúan en estudio, en el marco de la situación de inundación y anegamiento, producto de intensas lluvias que han atravesado distintas localidades de la provincia.

En la provincia se registraron personas con las siguientes enfermedades:

Leptospirosis: actualmente continúan internados dos pacientes en unidades de cuidado intensivo (uno en Reconquista y otro en Santa Fe), dos pacientes fallecidos confirmados (una mujer de Santa Fe y un hombre de zona rural Chabás).

Hantavirus: fueron confirmados cuatro casos, uno de Arroyo Seco, otro de Rosario y de San Nicolás (Buenos Aires), además de una mujer de San Jorge. Todos tuvieron una buena evolución y actualmente fueron dados de alta.

Dengue: sigue vigente el alerta frente a casos de dengue y Chicungunya en países limítrofes y la circulación de virus dengue en Córdoba. En la provincia, hay tres casos confirmados (en Rosario) con buena evolución. Se trata de 2 mujeres y un varón.

Recomendaciones a la población

Desde Salud destacan la importancia de consultar en forma precoz al médico frente a la aparición brusca de fiebre alta, dolor intenso de cabeza y detrás de los ojos, dolores musculares y de las articulaciones, náuseas y/o vómitos; y deben referir el antecedente de inundación, viajes o tareas de riesgo.

Se deben seguir las indicaciones médicas y no automedicarse; evitar el contacto con agua estancada y utilizar medidas de protección adecuadas cuando se trabaja en zonas de riesgo: botas y guantes.

Además, es importante mantener limpios los alrededores de los domicilios, eliminando basura y escombros, para que no se transformen en refugio de roedores; colocar la basura en recipientes con tapas ajustadas y eliminar elementos inservibles para evitar la proliferación de mosquitos.