El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, espera que el giro de la política de su país hacia Cuba, sea una oportunidad de influir para que se produzcan cambios en la isla, indicó en una entrevista difundida este domingo.

"Cuba nos ofrece un ejemplo de una oportunidad de intentar algo nuevo", señaló el presidente en una entrevista en el programa State of the Union.

El mandatario defendió que durante más de 50 años el Gobierno estadounidense ha intentado derrocar el régimen a través del aislamiento y "no ha funcionado".

Por eso, consideró que "si nos involucramos, tenemos la oportunidad de influir en el curso de los acontecimientos en un momento en el que va a haber algún cambio generacional".

"Creo que debemos aprovecharlo y tengo la intención de hacerlo", agregó el mandatario.

Estados Unidos y Cuba anunciaron esta semana la reanudación de sus relaciones diplomáticas rotas desde 1961, y una serie de medidas de acercamiento a la isla que incluyen, entre otras cosas, la flexibilización de las restricciones a los viajes y el comercio, así como a las remesas que reciben los cubanos desde EE.UU.

Además, Obama ha pedido a su secretario de Estado, John Kerry, que revise la inclusión de Cuba en la lista de países a los que Estados Unidos considera patrocinadores del terrorismo.

Por el cierre de Guantánamo

Por otra parte, Obama aseguró que durante los dos años que todavía le quedan en el cargo hará todo lo posible para continuar presionando para cerrar el centro de detenciones de la base militar de Guantánamo, una de sus promesas de campaña.

"Voy a hacer todo lo que pueda para cerrarlo", dijo Obama en la entrevista del programa de la CNN grabada el viernes, antes de que él iniciara sus vacaciones.

El mandatario consideró que el hecho de que siga abierto con más de un centenar de presos "es algo que continúa inspirando a los yihadistas y extremistas de todo el mundo".

El cierre de Guantánamo, una cárcel para acusados de terrorismo situada en la base que EE.UU. tiene en territorio cubano, es una de sus promesas pendientes de la campaña de 2008, para la que ha encontrado trabas en el Congreso, que ha impedido la transferencia de los presos a cárceles el país.