Científicos y médicos han dado grandes pasos durante las últimas décadas en el tratamiento de problemas cardíacos, en particular con el desarrollo en los últimos años de los llamados "parches cardíacos", parches diseñados de tejido cardíaco que pueden reemplazar el músculo cardíaco dañado durante un ataque al corazón.

Ahora, gracias al trabajo de Charles Lieber, de la Universidad de Harvard (EE.UU.), y otros investigadores, que se comunicó a través del portal de noticias abc.es, el siguiente paso podría estar más cerca.

Lieber describe en un artículo que se publica en "Nature Nanotechnology" que la construcción de andamios electrónicos a nanoescala puede sembrarse con células cardiacas para generar un parche cardiaco "biónico".

"Creo que uno de los mayores impactos en última instancia sería estar en el área que implica reemplazar tejido cardíaco dañado con parches de tejido preformadas, apunta Lieber. En lugar de simplemente implantar un parche de ingeniería construido en un andamio pasivo, nuestros trabajos sugieren que será posible implantar quirúrgicamente un parche inervado que sería capaz de controlar y ajustar sutilmente su rendimiento".

Una vez implantado, según Lieber, el parche biónico podría actuar de manera similar a un marcapasos, aplicando descargas eléctricas para corregir la arritmia, pero las posibilidades no terminan allí. "En este estudio, hemos demostrado que podemos cambiar la frecuencia y la dirección de propagación de la señal, continúa. Creemos que podría ser muy importante para controlar la arritmia y otros trastornos cardiacos".

Nueva generación

A diferencia de los marcapasos tradicionales, aáde Lieber, el parche biónico, como sus componentes electrónicos están integrados en todo el tejido, puede detectar la arritmia mucho antes y funcionar a tensiones mucho menores. "Incluso antes de que una persona comience a entrar en arritmia a gran escala que con frecuencia provoca daños irreversibles, u otros problemas cardíacos, puede detectar las inestabilidades en etapa temprana e intervenir antes, subraya. También puede monitorizar continuamente la regeneración de los tejidos y responder activamente".

Aunque el parche cardíaco biónico todavía no se ha implantado en animales, los científicos están interesados en identificar de colaboradores que investiguen la implantación del parche cardíaco para tratar el infarto de miocardio en un modelo de roedor. "No creo que fuera difícil construir esto en un sistema más sencillo y fácilmente implantable", afirma.