Daniel Salcedo y Osvaldo Raffo, peritos designados por la querella en la causa que investiga la muerte de Alberto Nisman, recorrieron este viernes el departamento en el que apareció muerto el fiscal y aseguraron que encontraron "algunas evidencias físicas que no habían sido tenidas en cuenta", aunque prefirieron no "divulgar" cuáles fueron.

Salcedo y Raffo son los peritos de la querella compuesta por la madre Nisman, Sara Garfunkel, y por la ex esposa, Sandra Arroyo Salgado, en representación de las hijas que tuvo con el fiscal, Iara y Kala, ambas menores de edad. 

En diálogo con la prensa, desde el portón de ingreso a la torre Le Parc donde realizaron la inspección, Salcedo explicó que solicitarán nuevas medidas de prueba a la Fiscalía, a cargo de Viviana Fein, y relató que recorrieron "el terreno, el lugar del hecho y sacaron nuevas pruebas fotográficas". 

"Trabajamos con distintos reactivos, luces forenses, luminol -que busca rastros de sangre- y se tomaron fotografías y realizaron filmaciones", resaltó Salcedo. 

Asimismo resumió que lo que hicieron fue "solicitar nuevas medidas de prueba para sumar a la investigación, en este caso evidencias físicas" y enseguida advirtió que no van "a dar entrevistas", salvo cuando tengan "información (científica) correcta y certificada".

En el mismo sentido, Raffo señaló que durante esta inspección "se trajeron nuevos aparatos especiales" y coincidiendo con su colega indicó que prefería no hacer más declaraciones a la prensa sobre su trabajo. 

De la inspección también participaron peritos de la Policía Federal, Fein, Arroyo Salgado y Garfunkel. Todos llegaron alrededor de las 11 de la mañana para participar de esta inspección, la primera pedida por la querella y autorizada por la jueza del caso, Fabiana Palmaghini y la primera en retirarse fue Arroyo Salgado. 

Los peritos de la querella fueron designados el 3 de febrero por Arroyo Salgado, para que intervengan en la causa en la que se investiga la muerte del fiscal especial de la Causa AMIA quien fue encontrado sin vida en el baño de su departamento, sobre un charco de sangre y con un arma a su lado, el 18 de enero.