Tras el lanzamiento de los nuevos iPhone 8 y 8 Plus, teléfonos de la marca Apple, se volvió a poner el precio que se paga en Argentina para adquirirlos a un valor muy distinto al de Estados Unidos. Un especialista dijo que a pesar de la aplicación de aranceles e impuestos, el monto exhibe "lo caro de los costos" del país.

En diálogo con el periodista Alberto Lotuf (A Diario, Radio 2), el analista de mercados de telecomunicaciones, Enrique Carrier, señaló que la brecha entre el precio del iPhone en Estados Unidos y Argentina es una cuestión "histórica". 

"Pasa en cada lanzamiento. Es importante tener en cuenta varios puntos: el primero, es un teléfono que se importa totalmente a diferencia de otras marcas; que se aplica un arancel del 18 por ciento, cuando para las firmas que producen acá es cero, e impuestos en un 27 por ciento", comentó.

Carrier deslizó que es "contradictoria" de impuestos y apuntó contra la carga al iPhone por considerarlo un bien suntuario. "El propio gobierno quiere que la gente cobre algunos beneficios a través del celular pero al mismo tiempo le cobra impuestos al teléfono, que los usa todo el mundo", indicó.

"Cuando uno ve el precio que se paga por el teléfono en Estados Unidos debe agregarle el impuesto a la venta que se utiliza allá, que se ubica entre un 5 y un 10 por ciento. Acá es del 21 por ciento", sostuvo al tiempo que explicó que además se deben sumar los "costos locales" de comercialización y el margen de ganancia.

"Esto muestra lo caro que es Argentina. A veces se habla de que el dólar está atrasado. Para mí tenemos costos caros", finalizó.