Hoy en día, cuando un paciente siente una dolencia, ya sea emocional y/o física, toma una decisión: va al médico tradicional o elige terapias alternativas. Generalmente, se opta por una o la otra, o por una y luego la otra al no conseguir resultados con la primera. Pareciera que a la hora de elegir se toma partido por Oriente o por Occidente,  según la convicción de cada uno: están los que se sientan en el diván, los que prefieren los fármacos y los que se dejan pinchar con agujas.

Ambos paradigmas, el tradicional y alternativo, suelen ser irreconciliables en una única terapia, sin embargo, la Psiconeuroacupuntura (PNA), rompe con esta escisió. al ser una técnica que relaciona la mente humana, las emociones, los rasgos y las funciones cognitivas con el sistema orgánico, energético y neurológico. La PNA conjuga las Neurociencias y la Psicología con la Medicina Tradicional China, es una técnica moderna  que tiene aplicación en el diagnóstico y tratamiento de alteraciones mentales, emocionales y psicosomáticas.

Juan Pablo Moltó Ripoll, su mentor y fundador. lleva desde 1995 estudiando, desarrollando y organizando didácticamente la disciplina, recorriendo el mundo y formando nuevos profesionales. Comenzó siendo acupuntor y luego, como veía que con esa técnica sola no era suficiente para acabar con las dolencias de sus pacientes, comenzó a estudiar neurociencias y psicología para complementar la terapia.

“Hay dos tipos de terapia, las que van del cuerpo a la mente, por ejemplo, los masajes, la osteopatía y las contrarias que van de la mente al cuerpo, que son las psicoterapias. La psiconeuroacupuntura lo que suma es que es una técnica que aúna en una misma sesión, las dos técnicas.  Es una terapia que va del cuerpo a la mente y de la mente al cuerpo”,  explica Moltó Ripoll y destaca el carácter científico de la misma: “Lo que hace la psiconeuroacupuntura, a diferencia de otras terapias que también trabajan la relación cuerpo y mente como la Gestalt, es pinchar. Agregamos una técnica milenaria de más de 5 mil años de antigüedad, con mucha evidencia científica como es la acupuntura. No es magia, no trabajamos con energía sino que trabajamos con reacciones neuronales, fisiológicas”. 

Al consultarle por los aportes de la psiconeuroacupuntura a las terapias tradicionales y alternativas, Juan Pablo sostuvo: “Por lo general. los acupuntores están entrenados para tratar pacientes pero no tienen habilidades para resolver sus conflictos más allá de la consulta. Es decir, si por ejemplo tuvieras una gastritis, un acupuntor te puede ayudar a eliminar el dolor, pero si esa gastritis está relacionada con tu comportamiento y con tus relaciones sociales, con el trabajo, el estrés, pareja, etc.;  vas a volver a tenerla”. Y continuó: “Por el otro lado, los psicoterapeutas, por lo general, trabajan desde el cerebro para que entiendas qué te pasa en tu vida, para que puedas mejorar. Pero si ya tenés un problema físico, no alcanza solo con eso, va a tardar mucho la recuperación del paciente. Te puedo ayudar a reducir el estrés, pero la gastritis o problema intestinal, no se va a aliviar tan rápidamente.  En cambio, o si unimos la acupuntura que trabaja lo físico y lo emocional, con la psicoterapia que trabaja lo emocional y lo físico, pero mucho más lento, vamos a conseguir una integración”.

Un punto muy importante que destaca Moltó Ripoll es que no cualquiera puede aplicar esta técnica sino que se requiere una formación universitaria previa: “La psiconeuroacupuntura tiene una gran carga científica, solo pueden hacerlo gente que tenga formación clínica, médicos, psicólogos, kinesiólogos, profesionales de la salud. Trabajamos en varias universidades como posgrado, acá en Argentina lo hacemos con el Colegio de Kinesiólogos, estuvimos en congresos de psicología y salud mental”.

La psiconeuroacupuntura combina cinco estrategias terapéuticas: una proveniente del psicoanálisis, otra muy parecida a la bioenergética de Alexander Lowen, otra se basa en las teorías breves, otra que combina técnicas de creatividad y técnicas de disociación, es decir, técnicas para aprender a ponerse en el lugar del otro. “Cuando yo te estoy pinchando un punto, por ejemplo, en la pierna, una parte de tu cerebro se está activando, que no tiene que ver con la parte de la pierna, tiene que ver con la vinculación de ese punto a un proceso cognitivo, como podría ser la visión, la atención. Entonces se estimula partes del cerebro a la vez que se realiza una psicoterapia. Por eso es imprescindible que seas médico o psiquiatra, por el nivel en el que se trabaja”.

El tratamiento de psiconeuroacupuntura es de tres a seis meses, no utiliza fármacos sino que se pueden indicar remedios biológicos como vitaminas, minerales y ungüentos. “Cuando el paciente llega al consultorio del psiconeuroacupuntor, primero se le realiza un estudio para conocerlo, sus conductas y análisis físico. Una vez que ya sabe la historia y se conoce el cuerpo, se une en una psicoterapia. El paciente se recuesta en una camilla, el psiconeuroacupuntor le coloca las agujas, generalmente se ponen de rodilla para abajo y del codo a la mano. Cuando las agujas están puestas, se realiza la psicoterapia”.  El profesional sostiene que al estar colocadas las agujas,  el cerebro está sintiendo de otra manera, está activado, entonces  genera nuevas conexiones, nueva plasticidad neuronal, eso es lo que hace la diferencia.

Uno de los problemas en Argentina, según el especialista, es que las técnicas de medicina alternativa como acupuntura, osteopatía y terapias como la biodescodificacion, no están reguladas en Argentina, cualquiera las ejerce y muchas veces de modo incorrecto, siendo un peligro para el paciente. “La acupuntura, los masajes, la osteopatía son todas técnicas muy serias, el problema es que no están reguladas en Argentina. En Europa, hay que estudiar cinco años para poder aplicar esas técnicas. Para ejercer medicina china en otros países tenés que estudiar en una universidad anatomía, fisiología, sistema nervioso, método científico”.

La sede oficial de Psiconeuroacupuntura está en España y hay otra en Miami. En Argentina, Mariana Colabianchi es la responsable y coordinadora de los cursos de formación en diferentes ciudades. Los mismos tienen una duración de 5 módulos y se dictan cada tres meses con profesores europeos.

En septiembre de 2015 se abre la nueva inscripción al posgrado en Rosario y Buenos Aires dirigido a profesionales de la salud que quieran formarse en esta técnica.

Más información: http://psiconeuroacupuntura.com