La vista es uno de los sentidos que sufren en mayor medida el paso del tiempo, y prevenir las complicaciones de las enfermedades oculares debe ser una tarea cotidiana.

Una de las enfermedades que pueden dañar tu visión es la Degeneración Macular Relacionada con la Edad (DMRE), que por darse en la retina es una de las principales causas de deterioro visual en países de primer mundo. Es más frecuente en personas mayores de 50 años.

Una de las complicaciones de las enfermedades oculares como la DMRE, es la formación membrana neovascular, unos pequeños vasos que se forman en la retina a causa de miopía o una ruptura coroidea (lesiones en la retina) provocada por un golpe fuerte, aunque también puede aparecer de manera espontánea.

Uno de los métodos más efectivos para conocer si una persona padece este problema ocular es la prueba denominada “rejilla de Amsle”. Cualquier persona puede realizar en su domicilio este test, para lo que necesitará una hoja cuadriculada de una libreta de apuntes.  El paciente debe taparse un ojo con una mano y con la otra, sujetar la cuadrícula para ver el dibujo en forma de rejilla, y se debe repetir el mismo ejercicio con el otro ojo.

Si al terminar este ejercicio no ha apreciado ningún tipo de cambio en las líneas, no debe preocuparse; pero si por el contrario ha visto alguna mancha negra sobre el papel o que el trazado rectilíneo tomaba forma de curva o produce un efecto de onda, se debe acudir al oftalmólogo ya que es un posible síntoma de degeneración macular asociada a la edad, la metamorfopsia o visión de líneas rectas de forma ondulada.

A este sencillo y eficaz método se añaden otros procedimientos avanzados como la tomografía de coherencia óptica (OCT), complementada por el examen clínico, además de terapias efectivas como los inhibidores del factor de crecimiento del endotelio vascular para frenar la progresión hacia la ceguera progresiva que se administran en forma de inyecciones intraoculares.

El tabaquismo provoca daños en la visión puesto que recibe constantemente por parte del fumador agresiones químicas procedentes del consumo continuo de cigarrillos. La alimentación es otro de los aspectos que puede influir positivamente en la prevención de la degeneración macular asociada a la edad.

Un estudio publicado en la revista especializada Archives of Ophtalmology confirmó que las mujeres mayores de 50 años que habían tomado al menos dos raciones a la semana de pescados ricos en ácidos grasos Omega 3 durante su vida, consiguieron disminuir hasta en un 40 por ciento el riesgo de desarrollar la enfermedad.

Puesto que el cuerpo humano no puede fabricar ni sintetizar los ácidos grasos Omega 3 a diferencia de otro tipo de grasas, su inclusión en los hábitos alimenticios cotidianos en forma de pescados como salmón, sardina, trucha o atún, beneficiarán a largo plazo a la salud ocular por sus efectos antiinflamatorios, antiescleróticos y antitrombóticos.

A esta fuente de animal de ácidos grasos deben sumarse los nutrientes de la vitamina C (grosella negra, col verde, pimientos, kiwis y cítricos), vitamina E (aceite de oliva y de girasol, avellanas, nueces) y los carotinoides de luteína y zeaxantina (espinacas, yemas de huevo, brócoli, maíz), así como el zinc (presente en carne roja y ostras).