Con la ola de calor comenzaron los cortes de luz y desde la Agencia Santafesina de Seguridad Alimentaria (Assal) brindaron recomendaciones para conservar mejor los alimentos en caso de que la heladera deje de funcionar temporariamente.

Estas interrupciones en el servicio eléctrico “ponen en peligro la seguridad de aquellos alimentos que para su conservación requieren de la cadena de frío”, destacaron desde el organismo. Se considera una interrupción de la cadena de frío cuando se superan las dos horas a temperaturas mayores de 5º centígrados.

Precisaron que “el grado de pérdida y preservación –de estos productos– dependerá del tipo y cantidad de alimentos que estén guardados en la heladera” y destacaron que difunden esta medida teniendo en cuenta que “el consumo indiscriminado de energía eléctrica debido a las altas temperaturas de los últimos días, sumado a las inundaciones que está atravesando toda la región del Litoral, puede ocasionar cortes de luz”.

Por ello, la Assal recomienda abrir lo menos posible la heladera durante los cortes; revisar que el cierre de las puertas, sobre todo los burletes, esté en buenas condiciones, ya que su deterioro contribuye a la pérdida de frío.

Además, se sugiere limitar la compra de alimentos perecederos que necesiten ser refrigerados, y tratar de reemplazarlos por otros no perecederos. “Por ejemplo, usar leche en polvo en vez de fluida”, grafica la Assal.

También se indica extremar cuidados con el consumo de todo tipo de carne (vaca, cerdo, pollo, pescado). Hay que cocinarla muy bien y en forma completa. Si la carne perdió la cadena de frío, hay que desecharla, aunque conserve su color y olor, ya que la proliferación de bacterias se produce antes de que esas características se modifiquen.

En cuanto a los alimentos conservados en el freezer, deben revisarse antes de su consumo. Si se observa descongelamiento (cajas mojadas, ablandamiento, presencia de cristales de hielo), consumir los productos en el momento. Nunca se debe volver a congelar algo que ya se descongeló.

Finalmente, la Assal enfatizó que ante la duda se debe “evitar el consumo de los alimentos que hayan permanecido más de dos horas por encima de la temperatura de conservación recomendada”.