La comida rápida es para muchos una alternativa para no quedarse sin comer y evitar pasar largas horas en la cocina; sin embargo, después de ingerirla, aparece ese sentimiento de arrepentimiento, ya que se sabe que este tipo de alimentos tiene demasiadas calorías y es una de las causas del aumento de peso.

Muchas personas procuran evitar todo tipo de menú de comidas rápidas o similares porque no quieren correr los riesgos que ello implica; no obstante, lo que algunos no tienen en cuenta es que hay ciertos alimentos de la dieta regular que engordan tanto como lo hacen la popular comida basura.

Es importante saber que todos los alimentos que eleven o causen alteraciones en el índice glicémico son los responsables de que se produzca una mayor acumulación de grasas en el cuerpo.

Por tal motivo es bueno conocer cuáles son dichos alimentos y cómo ir reduciéndolos en la dieta para que no influyan en el aumento de peso.

1. Pan blanco

Muchos podrían pensar que lo que engorda en las comidas rápidas son las carnes, las salsas y otros añadidos procesados que no son para nada saludables.

Lo cierto es que el pan blanco, ese mismo que se incluye en la dieta como desayuno o merienda, tiene mucho que ver con la acumulación de grasa al estar compuesto de un alto índice glicémico.

Para consumir un tipo de pan más saludable, se aconseja revisar las etiquetas y comprobar que su ingrediente principal sea “harina integral”.

2. Sandwich de atún

En este caso es importante aclarar que el culpable no es el atún, ya que es un ingrediente con un nivel calórico muy bajo. Lo que resulta dañino y poco apropiado son los acompañantes que lo complementan como, por ejemplo, las salsas y el pan blanco.

Para no dejar de disfrutarlo, utiliza pan integral, lechuga, tomate y un chorrito de aceite de oliva en lugar de salsas.

3. Fiambre procesado

Los alimentos procesados suelen estar compuestos de altos niveles de grasa y sodio, además de conservantes químicos que influyen en el aumento de peso y en los problemas en el metabolismo.

Estos también se conocen como alimentos de “calorías vacías” porque no proporcionan ningún tipo de valor nutricional.

4. Ensaladas preparadas

En los supermercados o casas de comidas rápidas ya se pueden adquirir bandejas de ensaladas preparadas y listas para su consumo inmediato.

Este tipo de productos pueden parecer una opción saludable de alimentación, pero lo cierto es que en muchos casos no lo son.

Puede que los vegetales de las ensaladas sean bajos en calorías e ideales para complementar la dieta; no obstante, las salsas y aderezos que se les agrega pueden ser muy calóricos y perjudiciales para el organismo.

Platos como la ensalada de trocitos de panceta, queso, pan frito y frutos secos tiene un elevado contenido de calorías que se debe consumir con moderación.

Lo ideal en estos casos es preparar las ensaladas en casa con ingredientes frescos y 100% orgánicos.

5. Helados

Si el objetivo es mantener un peso ideal y una figura esbelta, los helados no son precisamente los mejores aliados y, de hecho, se pueden convertir en un obstáculo para quemar grasa.

Este postre que tanto gusta para disfrutar como acompañamiento o merienda está compuesto por un número elevado de calorías, azúcares y grasas que terminan por acumularse en el cuerpo.

El azúcar es uno de sus ingredientes más perjudiciales, ya que incrementa el índice glicémico y con ello provoca la alteración del funcionamiento de varios órganos importantes.

Para reemplazarlo en la dieta se aconsejan los postres caseros de frutas y verduras, sin añadidos lácteos.

6. Sushi

Es cierto, las algas son muy bajas en calorías y están aconsejadas para bajar de peso. Pero el relleno de esta famosa receta oriental incluye alimentos como la salsa de soja, el queso o la salsa picante, entre otros, que lo hacen ser tan rico en calorías como una comida rápida.

Fuente: mejorconsalud.com